Václav Brožík, el pintor de la historia checa, nació hace 170 años
Representante de la pintura académica histórica y de la generación del Teatro Nacional, fue el pintor checo más famoso en Europa de las últimas décadas del siglo XIX.
Václav Brožík nació el 5 de marzo de 1851 en el pueblo de Železný Hamr, cerca de Pilsen. A pesar de proceder de una familia humilde, accedió a la Academia de Praga y siguió estudiando en Alemania, primero en la Academia de Dresde y luego en la de Múnich. En 1876 se marchó a París, donde obtuvo reconocimiento por parte de la crítica y el público. En su carrera le ayudó casarse con la hija de Charles Sedelmayer, un rico financiero y comerciante de obras de arte. Brožík vivió muchos años entre París y Praga, adonde acudía a enseñar a la Academia.
Autor de cuadros históricos
La fama le llegó Brožík de repente en 1878 en París. Sus temas tenían que ver a menudo con los husitas, los Habsburgo o las defenestraciones de Praga. Solo que su estilo realista y pomposo a finales de siglo se convirtió en objeto de burla por la siguiente generación artística, que rechazaba el conservadurismo realista frente al modernismo y el simbolismo.
Las galerías, sin embargo, nunca rechazaron sus obras. Incluso cien años después, en 2003, la última gran exposición dedicada a Brožík en Praga obtuvo una gran respuesta por parte del público.
Václav Brožík recibió la Legión de Honor francesa, fue miembro de la Academia de Bellas Artes de París y de la Academia de Ciencias y Artes checa. En 1897 obtuvo un título nobiliario de manos del emperador Francisco José. Murió el 15 de abril de 1901 en París de un fallo cardiaco con solo 50 años. Václav Brožík está enterrado en el cementerio de Montmartre parisino.