Científicos checos inauguraron una base polar tras cinco años
El pasado fin de semana científicos checos inauguraron después de más de cinco años de trabajo una estación oficial de la República Checa en la isla de James Ross en la Antártida. A la inauguración acudieron también representantes de las autoridades argentinas y chilenas.
La expedición de científicos checos consiguió inaugurar por fin la base polar tras varios años de duro trabajo. El grupo llegó a la isla ya en los últimos días del año pasado, y durante su estancia los científicos tuvieron que hacer frente a condiciones climáticas extremas.
"Debido al temporal de nieve tuvimos que interrumpir las labores en pleno terreno. Todos los expedicionarios se encuentran bien y en este tiempo estamos manteniendo y arreglando los equipos", escribió en un email desde la Antártida el jefe de la expedición Pavel Prosek.
Según el profesor Prosek los geólogos continúan con las labores cartográficas para conocer mejor las amplias áreas desheladas en la parte septentrional de la isla. Otros miembros de la expedición se dedican a estudiar las actividades volcánicas y se centran en la problemática de los cambios de glaciación relacionada con el proceso del aumento de la temperatura global.
Los biólogos de la expedición se encargarán de la investigación de algas, musgos y microorganismos. El asunto más importante desde su punto de vista es investigar cuáles de las características de estos organismos son las que les permiten sobrevivir y crecer en el extremo clima antártico.
Según el jefe del equipo checo Pavel Prosek todos sus miembros son profesionales y las duras condiciones laborales de la Antártida no les desaniman.
"Todos ellos ya habían trabajado en las áreas polares y tienen mucha experiencia", dice Prosek.
El equipo checo permanecerá en la estación polar de Johan Gregor Mendel, bautizada en honor del conocido científico, hasta el principio del invierno antártico.