Los checos y las supersticiones
"Martes trece no te cases ni te embarques". Este dicho lo conocerán seguramente todos ustedes, amigos oyentes. Y algunos de ustedes, a lo mejor, creen en las supersticiones y el martes trece lo tendrán relacionado con alguna experiencia desagradable. También en la República Checa hay muchas personas supersticiosas. Pero, a diferencia de los países de habla hispana, para los checos la "fecha de mala suerte" es el viernes trece.
Sobre su relación hacia la fecha - viernes trece - hemos hablado en A Toda Marcha con personas de varias regiones de la República Checa. Olda, de 55 años de edad, quien vive en Moravia cerca de la frontera con Eslovaquia reaccionó espontáneamente cuando le preguntamos ¿Qué significado tiene para usted el viernes trece?
"El viernes trece es, sin duda, un día de mala suerte para mí. Puedo presentar varios testimonios. Hace un par de años, por ejemplo, me quebré la clavícula en esa fecha. Otra vez, andaba en bicicleta y de pronto apareció frente a mí un perro. Ya no pude prevenir el accidente. Me caí de la bicicleta, me di bastante duro, la bicicleta se rompió y... ¿el perro? Siguió su camino, burlándose seguramente de mí".
Klára, de diez años, oriunda de Praga, asegura que es supersticiosa y que, en base a su propia experiencia está convencida de que el viernes trece trae mala suerte.
"Sí, porque yo tengo muy mala suerte ese día. Cuando fuimos con mi escuela a una estadía de una semana al campo y la maestra me dijo que escribiera mi nombre en un nuevo cuaderno, tres veces tuve que rehacerlo. En vez de poner mi nombre en la primera página, lo puse en la última, luego lo escribí en la primera, pero patas arriba. Y desde aquél entonces el viernes trece no es mi día preferido".
Ondrej, de 29 años, de la ciudad de Písek, Bohemia del Sur, tiene bien claro lo que significa el viernes trece.
"Para mí significa una sola cosa. Que después del viernes trece viene el sábado catorce y el domingo quince".Arnost, de 48 años, de Moravia del Sur tampoco es supersticioso y adopta una postura semejante a la de Ondrej.
"El viernes trece lo considero simplemente un día laboral. O sea, un día laboral como cualquier otro día de trabajo. Y eso es todo".
Con Svetlana de 46 años, nos encontramos en la metrópoli morava de Brno. Nos confesó que la fecha de la que hablamos le trae tristes recuerdos.
"El viernes trece es un día muy triste para mí porque me hace recordar que, hace cinco años, el trece de marzo a las trece horas, o sea, a la una de la tarde, falleció mi mamá a la que quería mucho y con la que me entendía muy bien".
Svetlana sostiene que, no obstante, su postura frente al viernes trece y las supersticiones, es un poco contradictoria.
"Quiero decir, por otro lado, que el viernes trece me trajo varias cosas positivas. Hace 35 años, por ejemplo, el viernes 13 de abril nació mi hermano, quien es once años menor que yo, pero con quien, a pesar de ello, tenemos hasta hoy una muy bonita relación y nos queremos mucho".
En esta A Toda Marcha conversamos sobre la fecha viernes trece que para los checos que son supersticiosos significa lo mismo que el martes trece en los países de habla española.
Y ustedes, amigos ¿son supersticiosos?