Checos festejaron los 20 años de la caída del comunismo
La Avenida Nacional de Praga se llenó este martes de flores y velas encendidas, convirtiéndose en lugar central de las conmemoraciones del 20 aniversario del la Revolución de Terciopelo en Checoslovaquia. Los festejos de la derrota del comunismo han tenido lugar en todo el país, pero en la capital se han realizado los principales.
En el acto intervino el ex presidente checo y líder de la Revolución de Terciopelo, Václav Havel, quien expresó su respaldo al llamamiento de los estudiantes.
“Aprecio esta iniciativa estudiantil porque subraya la necesidad de que cada uno de nosotros asumamos parte de la responsabilidad. Estoy de acuerdo que todos debemos participar activamente en el desarrollo de la sociedad. No hay por qué tener miedo, pues lo hacemos en beneficio de todos. De otra manera nunca lograremos que las cosas vayan cambiando según lo deseamos y que la situación mejore más todavía.”
Políticos nacionales y jefes de los parlamentos de los países poscomunistas conmemoraron el aniversario de la Revolución de Terciopelo en una conferencia efectuada en el Senado checo, en Praga. El primer ministro, Jan Fischer, señaló que a 20 años de la caída del comunismo, la democracia en el país sigue siendo frágil y es necesario continuar fortaleciéndola. “A veces somos muy críticos al evaluar los 20 años que han transcurrido desde la caída del comunismo. Con razón criticamos los fenómenos negativos en la sociedad. Pero debemos tener presente que la sociedad checa ha cambiado totalmente durante ese período. Estoy convencido que lo positivo supera lo negativo, aunque de vez en cuando nos vemos enfrentados a ciertos problemas.” Con silbidos de descontento recibieron los ciudadanos en la Avenida Nacional de Praga la llegada del presidente de la República, Václav Klaus, quien colocó una ofrenda floral junto al monumento al 17 de noviembre de 1989. Los presentes le reprocharon a Klaus sus posturas negativas a la integración de Europa y le exigieron que no siga afectando a la República Checa en el exterior. Según el Presidente, esa es también una faceta de la democracia, o sea, que cualquier persona puede criticar públicamente al presidente de la República, sin ser castigada.La Policía tuvo que intervenir contra una manifestación no permitida del Partido Obrero de extrema derecha, cuyos participantes trataron de alterar las celebraciones en la Avenida Nacional. Los extremistas atacaron e hirieron a varias personas que han tenido que recibir asistencia médica. En total cerca de 50 extremistas fueron detenidos por la Policía.