Checos temen el aumento del precio de vino
Los eurodiputados checos luchan por mejorar la calidad de los alimentos. Los amantes del vino temen el aumento de su precio. Policía podrá irrumpir en las viviendas para salvar a animales maltratados. Estos son algunos de los temas que comenta este martes la prensa checa.
No se trata de invitar a sus compañeros a que conozcan la gastronomía checa sino de una forma de protesta contra la mala calidad de los productos alimenticios importados a la República Checa.
Como explica el diario, en los supermercados checos se pueden encontrar los mismos productos de Europa Occidental, que llevan el mismo nombre y un embalaje idéntico.
“Hemos comprado alimentos de la misma marca en Bruselas, en Estrasburgo y en Chequia como chocolates, café, quesos, yogures y ketchup, entre otros. En total fueron 24 productos que han sido evaluados por la Universidad Mendel de Brno”.
“Las diferencias no son inmensas pero sí son importantes”, afirmó la eurodiputada y lamentó que los productores de dichos alimentos se negaron a hacer cualquier comentario al respecto.
Eso podría cambiar ya que los eurodiputados checos quieren, junto a sus compañeros de Rumania, presionar a la Comisión Europea para que todos los alimentos tengan la misma composición en todos los países donde se comercializan, concluye Mladá Fronta Dnes.
Además del nuevo impuesto, el precio del vino se verá afectado también por la subida del IVA en 2013. Según Lidové Noviny, los viticultores checos ya demostraron su disgusto y señalaron que no podrán competir con los vinos baratos importados del sur de Europa.
Sin embargo, Kalousek insistió en que el vino es una bebida alcohólica como cualquier otra y no existe razón alguna para que haya un impuesto al consumo de cerveza y no sobre el vino.
Actualmente la Policía puede irrumpir por ejemplo en automóviles o en terrenos donde se encuentra un animal cuya vida corre peligro. Entrar en una vivienda es posible sólo en caso de que se encuentre en peligro la vida o la salud de seres humanos.
Según el periódico la nueva ley quiere ayudar a personas que se ven afectadas por el ruido y otras molestias relacionadas con la presencia de un animal maltratado en su vecindad.
“Así la Policía podría irrumpir en una vivienda cuyos habitantes no dan de comer suficientemente a los pececillos de su acuario“, dijo en entrevista para Právo el diputado del partido TOP 09 Petr Gazdík.
