Primer ministro checo acusa de activismo político al jefe de la Policía
El jefe de la Policía checa, Petr Lessy, atraviesa un momento difícil. Tras recientes éxitos en la eterna lucha contra la corrupción, debe repeler ahora ataques de altos cargos del oficialismo que piden su cese y le acusan de activismo político.
“El presidente de la Policía empezó a caminar por el sendero del activismo político. Desde mi punto de vista incluso se sale de dicha frontera, lo que no está bien”, subrayó Nečas.
Petr Lessy se ha convertido en la piedra en el zapato para el primer ministro, Petr Nečas y los ministros del Interior y Finanzas, Jan Kubice y Miroslav Kalousek, respectivamente.
El detonador del asunto fue la revelación hecha por un agente de la Policía que informó a sus superiores que el Ministro Kalousek le había llamado por teléfono para intimidarlo por las investigaciones en torno a la vicepresidenta de la Cámara de diputados, Vlasta Parkanová, sospechosa de abuso de poder y de malversación de fondos públicos.El primer ministro Petr Nečas reprendió a Kalousek y amenazó con destituir a cualquier ministro que trate de influir en las investigaciones policiales. Dicho esto, el presidente de la Policía confesó que el ministro Kalousek también había tratado de intimidarle vía telefónica.
Ambos fueron convocados por la Comisión de Seguridad de la Cámara Baja que recomendó a Nečas la destitución de Kalousek. El primer ministro apuntalado por el jefe de la cartera del Interior, conocido rival del jefe de la Policía, se sumaron a la cruzada iniciada por el ministro de Finanzas.
El opositor Partido Socialdemócrata convocó una moción de censura contra el Gabinete de Nečas a sabiendas de que no logrará imponerla, pero con el objetivo de denunciar el comportamiento arrogante y desprecio del oficialismo para con la Policía, entre otros asuntos.El enfrentamiento abierto entre el jefe del Gobierno y dos de sus ministros contra el jerarca de la Policía inquietó al propio presidente de la República, Václav Klaus, que llamó a consultas al uniformado, para que dé su versión de lo que está sucediendo, ante una opinión pública atónita testigo de otro pulso político.