La selección de fútbol sigue con las mínimas posibilidades de viajar a Brasil
La esperanza es lo último que se pierde, sigue repitiendo la selección checa de fútbol que continúa estando bastante lejos de Brasil tras empatar a cero con Italia en la sexta jornada de las eliminatorias para el Mundial 2014.
Por su parte, los checos superaron a los subcampeones europeos y se crearon varias posibilidades para marcar. Pero un magnífico Gianluigi Buffon neutralizó las ocasiones de Kozák y Jiráček que no lograron penetrar la puerta en un mano a mano frente al portero italiano. Y como Jiráček además estrelló el balón en el palo a falta de seis minutos para el fin del partido, el cuadro nacional se mostró muy decepcionado por el empate, según expresó el entrenador, Michal Bílek.
“Estamos desilusionados, ya que pudimos vencer a Italia. La situación en nuestro grupo así sigue igualmente difícil. Tenemos que jugar a tope en los partidos contra Armenia, Malta y Bulgaria y tratar de no perder en Italia para mantener viva la esperanza”, dijo.
Los checos siguen ocupando el tercer lugar del grupo B, cinco puntos por debajo del líder de la clasificación, Italia, que en Praga dio otro paso para clasificar directamente pra el Mundial. Mientras que el cuadro nacional luchará por lo menos por la repesca con Bulgaria y Dinamarca, dijo el capitán de la selección checa, Tomáš Rosický.
“El empate significa que seguimos vivos y seguiremos peleando duro. Este empate no ha definido nada, de haber ganado, la situación habría sido mucho mejor. Nos esforzaremos por ganar los partidos restantes para clasificar para la repesca”, mencionó.
Las eliminatorias se definirán en otoño, cuando la República Checa recibirá en casa a Armenia y se enfrentará, a domicilio, sucesivamente a Italia, Malta y Bulgaria.