Aumenta la adicción a Internet entre los adolescentes
Los médicos checos diagnostican cada vez más casos de adicción a Internet en los adolescentes. El problema parece deberse al agravamiento de otros problemas psicológicos anteriores.
Se estima que actualmente en la República Checa el 1% de adolescentes de entre 11 y 14 años de edad muestra una conducta adictiva a Internet. El número de afectados aumenta más en los jóvenes de entre 15 y 18 años, donde llega a un 2%.
Según la psiquiatra del Departamento Infantil del Hospital Psiquiátrico de Bohnice en Praga, Lucie Pacherová, la adicción surge como consecuencia de otro problema, cuya solución los jóvenes afectados buscan escapando al mundo virtual.
“En la mayoría de los casos, los pacientes acaban ingresados en el hospital por otro problema, como un trastorno de la conducta, depresión o fobia escolar. La adicción al Internet aparece más tarde.”
Este año el hospital psiquiátrico de Bohnice, recibió cinco pacientes con este diagnóstico y en todos casos se trata de varones. Según Pacherová, esta adicción aparece más en los adolescentes de la populación masculina, lo que se debe al hecho de que los varones son los que más problemas de comunicación y establecimientos de relaciones afrontan en la adolescencia.Según la psicóloga Petra Vondráčková, el riesgo de engancharse al mundo virtual es mayor especialemente en los niños y adolescentes que sufren problemas emocionales al igual que en los jóvenes superdotados e introvertidos. Cuando carecen de acceso a Internet, los afectados pueden sufrir estados de inquietud y nerviosismo.
Reconocer cuándo se trata de un uso excesivo de Internet, y así detectar la posible adicción, no siempre resulta fácil, prosigue Pacherová.
“Se pueden tomar en cuenta los criterios diagnósticos que son válidos para todos los tipos de adicciones. No quiero decir que un niño que pasa jugando dos horas diarias sufra algún problema y los padres deban preocuparse. El uso de las computadoras e Internet hoy en día forma parte de la vida de un niño. Sin embargo, si deja de comunicarse con su familia, desatiende las clases o no sale de casa, es evidente que se trata de un problema”, indicó Pacherová.
Las terapias a las que se someten los jóvenes adictos al Internet no difieren en un principio de las que se aplican a tratamientos de las adicciones al alcohol y drogas.
“Siempre hay que investigar sobre el problema que originó la adicción. Sin embargo, a los niños hay que tratarles de una manera más particular, ya que se supone que un quinceañero no va a hablar abiertamente de que es adicto al Internet. Después de solucionar el problema originario o al menos ofrecerle al niño una solución, el bloqueo puede desaparecer, y el niño ya puede tranquilamente juntarse con otros niños y atender las clases. Gracias a ello puede que se reduzca el número de horas que pasa con el ordenador, informó Pacherová.La adición a Internet es un fenómeno global, al que se suma también la nomofobia, es decir, la adicción al móvil que, según las estimaciones, sufre uno de cada dos checos.