Aumenta el número de padres que toman la baja de maternidad
La cantidad de padres que deciden aprovechar la baja de maternidad ha aumentado en la República Checa, aunque la cifra sigue siendo extremadamente modesta. Se trata de 179 hombres en el primer trimestre de 2015. El Gobierno checo planea cambios legislativos para fomentar que los padres compartan más con la madre la tarea de criar a los niños.
Uno de ellos es por ejemplo Václav, que explica así por qué.
“Mi mujer, que es médico, quería volver a su carrera, para no desactualizarse, para no perder su formación. Este fue el principal motivo, que mi mujer quería volver al trabajo”.
En Chequia se recibe durante la baja de maternidad un porcentaje del sueldo, pero eso no elimina la posibilidad de seguir ganando dinero como autónomo o con empleos temporales. Así, Václav, por ejemplo, trabaja dos días a la semana, dejando durante ese tiempo al niño con su madre o con su abuela.De hecho es muy posible que bastantes de los casi 200 padres en baja de maternidad realmente aprovechen la dotación pero continúen trabajando de alguna manera, mientras la madre se queda en casa con los niños.
La experiencia de otros países demuestra que la contribución del padre al cuidado de los niños durante los primeros años es positiva tanto para el niño como para la madre, que puede reincorporarse así más fácilmente al mercado laboral. Es por ello por lo que desde el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales se planean nuevas medidas legislativas para apoyar una mayor presencia paterna, señala la ministra Michaela Marksova-Tomanová.
“Nos gustaría volver a implantar la baja de paternidad de alguna manera. En este caso se trataría de una dotación proporcionada por el seguro médico”.Y es que en Chequia el padre no tiene derecho más que a un día de baja por enfermedad el día del parto.
Una situación diferente se da en cuanto a lo que se podría traducir como baja parental (rodičovská dovolená), que es posible solicitar una vez acabada la baja de maternidad y que puede tomar el padre, la madre, o repartírsela entre ambos. La baja de paternidad puede extenderse hasta tres años, puede compatibilizarse con cualquier trabajo y proporciona una aportación económica de entre 330 y 400 euros, dependiendo de la duración. A pesar de su carácter igualitario solo la piden el 3% de los hombres.
A este respecto, la ministra Marksová-Tomanová considera que el modelo podría ser el de los países escandinavos, donde la baja parental se divide entre los dos progenitores, y si uno de ellos no aprovecha su parte, pierde la dotación económica que le correspondería.