Los checos ya no son devoradores de conservas
¿Cuáles son los destinos favoritos vacacionales de los checos y qué estereotipos les acompañaban como turistas en el pasado? Este será el tema de la nueva edición de 'Hable Checo con Radio Praga'.
¿Por qué? Ya que voy, quiero descansar lo máximo posible.
En realidad, muchos checos no descansan demasiado durante las vacaciones–Češi o dovolené moc neodpočívají- ya que están preocupados por perder su trabajo -mají strach, že ztratí práci-. Y por eso toman vacaciones cortas. Algunos trabajan incluso desde la playa–pracují z pláže- para mostrar a su empleador que son imprescindibles.
Entonces me la jugaré–risknu to-. Si pudiese, me tomaría todas las semanas libres que me corresponden. Generalmente son cuatro y en algunas empresas incluso cinco. Sin embargo, las otras dos semanas las necesito para las vacaciones de invierno–zimní dovolená-.
Si te las puedes permitir...–když si je můžeš dovolit...-.
De hecho lo dice la misma expresión checa para denominar las vacaciones. Mientras que la palabra española deriva de la frase estar libre y la palabra inglesa holiday de un día santo, la palabra checa -dovolená-deriva del verbo -dovolit-, es decir permitir. La cuestión es si quiere decir que nos las podemos permitir o si tenemos que pedir permiso.
¿De hecho, a dónde vas de vacaciones? -kam jedeš na dovolenou?
Voy a Bibione, a Italia. Quiero desempolvar los recuerdos de cuando era pequeña. Es que después de la caída del comunismo, cuando se abrieron las fronteras, fue una de los destinos más frecuentados por los checos. Durante el comunismo solían viajar solamente a Polonia–Polsko-, Alemania Oriental–Východní Německo-, Rumania–Rumunsko-, Bulgaria–Bulharsko, Hungría -Maďarsko- y otros países del Bloque del Este–země Východního bloku-. Así que querían conocer el mundo occidental.
Y ¿qué país es el más frecuentado en la actualidad–Jaká země je nyní nejnavštěvovanější-?El número uno sigue siendo desde hace 11 años Croacia–Chorvatsko-. Sus playas–pláže- están a unos 1.000 kilómetros de Praga y en coche tardas solo unas ocho horas. Cada año se dirigen allí casi un millón de checos. Y resulta que al final se quejan de que se oye demasiado checo y que es como si se quedaran en casa. Otro destino preferido de los checos es Italia–Itálie- y Eslovaquia–Slovensko- y muy popular es también Grecia–Řecko- y España–Španělsko. Hace una década se puso muy de moda viajar a destinos más exóticos como Túnez–Tunisko- o Egipto–Egypt-. Y en los últimos años estos destinos van siendo sustituidos por países más lejanos como Tailandia–Thajsko-, Sri Lanka–Srí Lanka- o Bali–Bali-.
Explícame, ¿porqué se apodaba a los turistas checos con el nombre de –paštikáři-, lo que quiere decir consumidores de paté?
Es que durante el comunismo, pero también más tarde, los precios en el extranjero eran para un checo medio muy altos, así que muchos se llevaban la comida de casa. No era excepcional ver a una familia checa merendar una conserva con paté o salchichas debajo de la Torre Eiffel, e incluso ver a grupos trasnochando en los parques.Quién sabe si será por eso que Croacia prohibió en 2008 la importación de algunos alimentos propios. Sin embargo, no tardó mucho en volver a permitirlo, ya que muchos turistas cancelaron sus vacaciones–zrušili dovolenou-.
De todas maneras, según la última encuesta, actualmente solo el 4% de los checos lleva de vacaciones comida casera y hoy día la mayoría se alojan en hoteles de al menos 3*.
También se dice que los turistas checos no paran de quejarse–nepřestávají si stěžovat-. Que si la cerveza no es como la de casa–pivo není jako doma, todo es muy caro - vše je drahé-, o hablan a la gente local en checo pensando que les entenderán. Y finalmente llegan a la conclusión de que en Chequia se lo habrían pasado mejor–doma by jim bylo lépe-.Quizás antes fuera así pero creo que las cosas van cambiando. Pero sí es cierto que el año pasado el 67% de los checos pasaron sus vacaciones en Chequia, lo que el 25% más que el año anterior.