“Cada mujer es tan esbelta cómo se siente”

Luis Eduardo Suárez Nájera, foto: Dominika Bernáthová

La 15° edición de la 'Conferencia Internacional de Nutrición y Diagnosis' volvió a reunir en la capital checa a decenas de especialistas en alimentos y médicos de todo el mundo. A la cita acudieron también dos expertos mexicanos para presentar los resultados de sus investigaciones, enfocadas en el problema de la obesidad y el cáncer de mama, cuyas incidencias en México van en aumento.

Irma Pérez Contreras,  foto: Dominika Bernáthová
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), México con casi una tercera parte de población con sobrepeso, representa actualmente el país más obeso del mundo.

La doctora en Ciencias de la Salud Pública, Irma Pérez Contreras, desarrolla en la Universidad Benemérita Autónoma de Puebla investigaciones que abordan problemas con la nutrición y la obesidad. En Praga presentó los resultados de su estudio acerca de cómo las mujeres perciben su propio cuerpo. La médica ofreció a Radio Praga más detalles acerca de su estudio.

“Mi trabajo está enfocado a cómo visualizar los parámetros que la Organización Mundial de la Salud establece para poder definir obesidad y desnutrición. Cómo esto tiene ciertas contradicciones con respecto a los aspectos culturales de cómo las mujeres nos percibimos, como personas con un peso normal o anormal a diferencia de lo que la Organización Mundial establece. Considero que el manejo de la obesidad como un problema real tiene que partir desde el contexto que la propia mujer tiene con respecto a la percepción de su propio cuerpo”.

Foto ilustrativa: Comisión Europea
El estudio de Irma Pérez Contreras parte de entrevistas con 500 estudiantes de la Facultad de Medicina de una universidad pública de la ciudad de Puebla, que tenían que marcar cómo se percibían y cómo les gustaría verse con respecto a su cuerpo. Los resultados son sorprendentes, indica la médica.

“No hay una correlación real entre lo que establece la Organización Mundial de la Salud como normalidad y la forma de cómo una mujer, desde el punto de vista cultural, se sigue percibiendo. Las mujeres con sobrepeso se perciben como normales. Dado que en México la mujer en su contexto cultural no se está acostumbrando a verla con un contexto de un índice de masa corporal normal, se la observa como con bajo peso”.

La influencia occidental de la moda afecta negativamente

Según apuntó la médica, otro factor problemático es la influencia occidental de la moda, que establece cómo debe de ser la figura de una mujer. Este hecho puede causar que las mujeres con peso normal se perciban como obesas, lo que puede ser un detonante para problemas aún más graves.

Foto ilustrativa: FreeImages
“La depresión y el problema de no poder utilizar la moda como tal. Eso ha llevado que en México el número de suicidios haya aumentado. No en cantidades que puedan ser alarmantes, pero se asocia a la situación como la mujer obesa se siente frustrada por no poder estar en la vanguardia de la moda, que establecen los grandes diseñadores, que es el contexto de la mujer anoréxica. Por qué no establecer los diseñadores modas que estén acordes con las diferentes características de la población de cada país que también pueden venderse ampliamente”.

La propuesta planteada en el estudio es que el manejo de la obesidad en México debe de estar enfocado a una negociación con respecto a los estándares internacionales y la percepción de las propias mujeres.

La obesidad como factor de riesgo para el cáncer de mama

De acuerdo con los especialistas mexicanos, la obesidad puede ser uno de los detonantes para el desarrollo del cáncer de mama, cuya mortalidad en la actualidad prácticamente supera la incidencia del cáncer cervicouterino, según destacó el ingeniero químico industrial y el doctorando en Alimentos de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del Instituto Politécnico Nacional de la Ciudad de México, Luis Eduardo Suárez Nájera.

Luis Eduardo Suárez Nájera,  foto: Dominika Bernáthová
El objetivo de su investigación, presentada en Praga, consiste en el análisis de la forma de las células de grasa de la mama, y su modificación a través de los diversos tipos de esta enfermedad, según explicó el especialista.

“Ya que lamentablemente los casos aumentan, queremos dar herramientas a los médicos que puedan ayudar en el diagnóstico y en la prevención del cáncer de mama. Hemos encontrado que existen diferencias entre las células grasas entre personas normales y personas que padecen cáncer y, sobre todo, entre personas que padecen diferentes tipos de cáncer. Esto puede ser muy importante para el fúturo ya que podría sentar bases para proveer un diagnóstico más adecuado y más eficiente.

Según afirmó Irma Pérez Contreras, la prevención es la detección temprana y es necesario que los servicios de salud colaboren con el sector educativo. Por tanto, en México se crean campañas intensivas para que las mujeres acudan a revisiones con regularidad.

En cuanto al tema de la alimentación, en México existe una contradicción, apunta Irma Pérez.

Foto: Somkiat Fakmee,  FreeDigitalPhotos
“Por un lado tenemos obesidad y por otro desnutrición. Tiene que ver con la disponibilidad de los alimentos que tienen los niños y los jóvenes con respecto a alimentos con bajo contenido proteico y alto de azúcares complejos y almidones. Esta situación se aúna al poco ejercicio que se realiza y prácticamente enfocando en el contexto de la tecnología, el uso del Internet. Este aspecto ha hecho que los niños permanezcan muchas horas sin realizar ejercicio, y son horas extremas”. En México ya se han puesto en marcha campañas públicas para normalizar el contexto de los alimentos que se ofrecen en las escuelas.

Los especialistas mexicanos valoraron positivamente el contenido de la Conferencia de Nutrición y Diagnosis de Praga, apreciando la variedad de investigaciones presentadas que brindan ideas y oportunidades para desarrollar la ciencia en México.