Las delicias “prohibidas”
Salchichas, chorizos, embutidos, carne roja. Todo este manjar, tan popular en Chequia, fue incluido recientemente por la Organización Mundial de la Salud en la lista de alimentos carcinógenos. En esta edición de 'Hable Checo con Radio Praga' exploraremos el vocabulario relacionado con estas delicias poco recomendables.
Yo ya conozco tus trucos. Me dices eso para que te lo puedas comer tú. Y mañana me dirás lo mismo del chocolate... ¡Ni por asomo!–ani náhodou!
Bueno, te aseguro que yo no me lo he inventado–já si to nevymyslela-. Pero, eso sí, has descubierto mi intención. Al menos podrías compartir un poco conmigo, que estos chorizos–klobásy- me encantan. Comerlos con un poco de rábano–křen-, mostaza–hořčice- y pan -chléb- es la gloria.
Toma un poco y disfruta antes de que suban el precio de estas delicias para que la gente reduzca su consumo.
No sería la primera vez. En la primera República Checoslovaca, en la primera mitad del siglo XX, se impuso un impuesto especial en el salami húngaro–uherský salám-, que sigue siendo muy popular hasta la actualidad. Aunque no fue añadido por motivos de la salud, sino por ser considerado un producto de lujo. Es un salami elaborado a base de carne de cerdo, tocino–slanina- y pimienta blanca–bílý pepř-. Una leyenda urbana decía que contenía también la carne de asno -oslí maso-. En general, los salamis–salámy- son muy populares en Chequia. Uno de los más conocidos es el salami de caza -lovecký salám-. Es conocido por su sabor sazonado -kořeněná chuť- y su forma larga y rectangular. Se empezó a fabricar en los años 50 del siglo pasado y en 2011 obtuvo la denominación de origen de la Unión Europea.Entre otros salamis muy populares está el Vysočina, de forma de cilindro, el salami turístico–turistický salám- y el –paprikáš-, que lleva pimentón–paprika-, y es un poco picante–je trochu pálivý-.
Un poco menos popular es el salami enrollado -točený salám-, llamado también –točeñák-. Pero como es muy barato, es consumido frecuentemente por los estudiantes, que lo cortan en daditos –krájejí ho na kostičky- y lo mezclan con ketchup–kečup- para acompañar los espaguetis.
Lo que más me encanta a mí es la galantina -tlačenka-. Es una especialidad elaborada de carne de cerdo–vepřové maso- o pollo–kuřecí- encurtido en gelatina–rosol. Tiene forma de cilindro y se corta en rodajas–plátky-. Lo mejor es acompañarla con cebolla picada –nakrájená cibule-, vinagre–ocet, pepř–pimienta- y una buena cerveza.
Creo que este plato es casi tan nutritivo–výživné- y sano–zdravé- como la panceta–bůček-, otro manjar muy popular de los checos. Es la falda de cerdo, así que es bastante grasienta–tučná-. Se sirve asada–pečená-, ahumada–uzená-, cocida–vařená- y estofada -dušená-. Y lo mejor es acompañarla con col -zelí- y knedlíky, las bolas de masa cortadas en rodajas, tan populares en Chequia.
Muy ricas están asimismo las salchichas–špekáčky-, llamadas también –buřty-. Antes de que se hayan puesto de moda las barbacoas–grilovačky-con bistecs asados a la parrilla–grilované steaky-, etcétera, la gente solía reunirse alrededor de una hoguera y asar las salchichas –opékat buřty- espetadas en un palo.A mí me gusta asar el cigarro de vagamundos–trampské cigáro-, una salchicha flaca y larga, fabricada de ternera -hovězí- o de la carne de cerdo–vepřové-. Muy parecida es también la salchicha llamada –talián-. Está hecha de carne cruda y sazonada con culantro–koriandr- y tomillo–tymián-. A Praga llegó con un charcutero–uzenář- italiano a principios del siglo XX y en breve cobró una gran fama. En fin, en Chequia somos unos grandes carnívoros–velcí masožrouti-.
Sí, sobre todo tú, ya que, según lo esperado,no me has dejado ni un trozo de la salchicha.