Un cuadro de Josef Mánes podría revelar uno de los misterios de la cultura checa
Un cuadro desconocido hasta hace poco del destacado pintor checo del siglo XIX, Josef Mánes, será instalado tras su restauración en uno de los salones del palacio de Čechy pod Kosířem, en el distrito de Prostějov. La obra, de cuya existencia informó hace poco un coleccionista de arte privado, es un retrato de dos muchachas aristócratas. Los historiadores de arte se trazaron la tarea de descubrir de quién podría tratarse.
El cuadro y su marco están siendo restaurados actualmente para poder ser expuestos posteriormente al público en el palacio de Čechy pod Kosířem, a donde Mánes solía viajar con frecuencia, indicó la restauradora de arte Lucie Janusová.
”El estado del cuadro y su marco no es ideal. Esto se debe sobre todo a las condiciones climatológicas a las que fue expuesto durante años. Esto dañó la pintura, pero más que todo, causó la deformación del marco”.
Se calcula que la obra podría ser expuesta en público en mayo próximo. Los historiadores de arte tratan ahora de descubrir quiénes podrían ser las muchachas retratadas por Mánes, una morena y la otra una rubia. El administrador del palacio Čechy pod Kosířem, Martin Váña, tiene dos teorías sobre el tema.”Me acordé de un dibujo de Karolína O’Hegerthyová, una muchacha que había pasado cierto tiempo en este palacio, siendo pariente cercana de la familia aristocrática de Silva-Tarouca, propietaria del inmueble. La joven estaba enamorada de Josef Mánes y también él de ella, por lo que pudo haberla retratado con una amiga. Sin embargo, una relación amorosa entre el pintor y la joven era impensable, por pertenecer cada uno a una distinta capa de la sociedad”.
La otra teoría que tiene Martin Váña es que una de las muchachas podría ser Josefina, mujer que aparece más tarde en uno de los mejores retratos realizados por Mánes.
”El cuadro Josefína fue hallado hasta después de la muerte de Josef Mánes en 1871, y hasta el presente se desconoce quién fue la mujer retratada. Este retrato es una de las mejores obras de Mánes y actualmente forma parte de la exposición permanente de arte checo del siglo XIX de la Galería Nacional de Praga”.
El retrato de Josefína de Josef Mánes suele ser calificado como la Mona Lisa checa. En el siglo XIX, durante la época del renacimiento nacional en los territorios checos, la Josefína de Mánes era considerada como la mejor muestra de la belleza de la mujer checa, recordó Martin Váña.
”En caso de que se lograra demostrar que Josefína es también la rubia que aparece en el doble retrato de Mánes, y que se trata de Karolína O’Hegerthyová, llegaríamos a descubrir uno de los mayores misterios de la historia cultural de la nación checa”.
Como habíamos dicho, Josef Mánes pintó el retrato de las dos muchachas en el palacio de Čechy pod Kosířem. La obra fue regalada al parecer a los parientes de Silva-Tarouca, quienes vivían en el palacio de Pohled, en la comarca de Havlíčkův Brod. Más tarde el cuadro llegó a Praga, a manos del propietario de una fábrica, sin saberse cómo y por qué, y éste se lo regaló a su amante. El actual propietario del cuadro de Josef Mánes lo heredó.Al palacio de Čechy pod Kosířem el retrato retornó al enterarse su propietario de que en este inmueble está instalada la mayor colección de obras originales de Josef Mánes, que consta de 14 cuadros. El palacio fue sometido recientemente a una restauración general, que implicó también la creación de condiciones adecuadas para instalar en el inmueble valiosas obras de arte antiguo.