Más de 200 policías reforzarán la seguridad en los aeropuertos checos
Los aeropuertos checos serán aún más seguros. El Gobierno aprobó una normativa para reforzar, a partir de este año, la presencia de policías con entrenamiento especial en la protección de terminales aéreas.
Con un total de 12 millones de viajeros al año, el aeropuerto de Praga requiere mayores medidas de seguridad semejantes a las vigentes en otros países miembros de la Unión Europea.
El Ministerio del Interior presentó un plan para reducir las situaciones en las que los pasajeros o instalaciones de los aeropuertos puedan ser blanco de ataques terroristas.
“La República Checa se sitúa entre los países más seguros del mundo. Debemos continuar nuestras actividades en este sentido, no podemos bajar la guardia. La seguridad es una de las prioridades del Gobierno, y por lo tanto respaldamos a la Policía y demás miembros del sistema de protección”.
Los otros aeropuertos internacionales de Chequia, situados en las ciudades de Pardubice, Brno, Karlovy Vary y Ostrava, también verán reforzadas las medidas de seguridad.
Pero eso no es todo. Además del cambio que representa una mayor presencia de policías, los pasajeros tendrán que sujetarse a nuevas medidas respecto a su equipaje.
A partir de mayo rige en Chequia una directriz que atañe a todos los pasajeros que utilicen los aeropuertos del país. Es obligatorio que las maletas de viaje estén equipadas con candados de seguridad conocidos bajo las siglas de TSA, explicó Marika Janoušková, portavoz del aeropuerto Václav Havel.
En caso de que un maleta esté cerrada con llave o tiene un candado común y corriente, las autoridades pueden romper los mecanismos o la maleta si es necesario para inspeccionar el contenido, prosiguió la portavoz.
“Recomendamos a los viajeros que faciliten los controles, que utilicen candados TSA (Transportation Security Administration). Gracias a su tecnología los empleados de seguridad podrán abrirlos sin dañar las maletas“.
Dicha medida empezó a aplicarse en Canadá y EE.UU., pero cada vez más los países europeos han decido aplicarla en sus aeropuertos.
