Las empresas ceden un día para el trabajo solidario
Un día internacional quizá no tan popular en el mundo, pero que cada vez cuenta con más adeptos en la República Checa, es, por llamarlo de alguna manera, el Día de Trabajo Voluntario: una jornada laboral diferente.
En ese día laboral todos los trabajadores que deseen unirse a una causa justa y caritativa podrán ausentarse de sus escritorios e irse a trabajar de manera voluntaria en otros espacios por un lado necesitados de capital humano y, por otro lado, inusuales y exóticos para quienes están habituados al trabajo en las grandes corporaciones. Todo ello con el consentimiento de su empleador.
La organizadora de dicha actividad, Lucie Vañousková, menciona algunas de las posibles tareas que se pueden realizar.
"Contacto con la población mayor o que tengan algún tipo de discapacidad y actividades similares... Los voluntarios también pueden salir de excursión con los andadores en sillas de ruedas y ayudarlos con el transporte; o salir de paseo con personas mayores a lo largo de los ríos o a las ciudades".
En la edición del presente año podrán también hacer trabajos manuales como reparar monumentos o hacer tareas de mantenimiento de los jardines del Palacio de Troya en Praga.Para la República Checa se trata de la octava vez en participar, lo que según la plataforma zapojimse.cz, en donde los potenciales voluntarios pueden registrarse, ha dado un total de más de 40000 horas donadas de labor.
La iniciativa cuenta con el apoyo de 36 empresas del mundo. Se trata de una cooperación entre alguna agencia de cada nación concreta con el socio británico Business in the Community, perteneciente a una fundación caritativa del príncipe Carlos de Gales, y que se dedica, entre otros asuntos, a promover la responsabilidad social de las corporaciones.
El principio ético-social de esta idea es que sea una jornada para dar y recibir de manera equitativa.