Activistas bloquean de manera simbólica el Ministerio de Medio Ambiente
Grupos de activistas checos salieron a las calles de Praga para expresar su malestar por los problemas que afectan a la sociedad. Unos se dieron cita este martes frente al Ministerio de Medio Ambiente, mientras que otros protestaron contra el presidente Miloš Zeman en las cercanías del Castillo de Praga.
El malestar de la ciudadanía checa se siente en el ambiente. En plena temporada veraniega decenas de personas salieron a las calles de Praga para presentar sus quejas.
Un grupo pequeño de medioambientalistas, calculado en no más de 20 personas, se postró frente a las instalaciones de la cartera de Medio Ambiente este martes para exigirle al ministro Richard Brabec que cumpla con sus obligaciones, tal y como indicara a la agencia ČTK una de las activistas.
“Las personas aquí reunidas pedimos al ministro de Medio Ambiente que empiece a ejercer su misión, su objetivo que radica en la protección de nuestro entorno para la vida”.
Los miembros del capítulo checo del movimiento internacional Rebelión contra la Extinción dijeron que es necesario que los gobernantes cambien la política actual de emisiones de dióxido de carbono. De lo contrario acabaremos con el planeta, insistió la activista.“Los cambios climáticos que vemos hoy son resultado directo de las emisiones de dióxido de carbono de hace 20 o 30 años. En la actualidad producimos un número mayor de emisiones, por lo que la situación será aún más crítica, a tal punto que podemos afectar el equilibrio climático de la Tierra”.
Fuentes del Ministerio de Medio Ambiente valoraron el carácter pacífico de la manifestación, mientras que los activistas adelantaron que seguirán denunciando los peligros de cambio climático con pequeñas manifestaciones en diferentes partes del país.
En horas de la tarde del martes unas 200 personas se dieron cita en las inmediaciones del Castillo de Praga, sede presidencial, para denunciar los ataques contra el sistema democrático orquestados por el mandatario Miloš Zeman.
Junto a la estatua de Tomáš Garrigue Masaryk, el primer presidente checoslovaco, fue improvisada una tribuna desde la que se dirigió a los asistentes Fedor Bruoth, uno de los organizadores de la protesta.
“Somos testigos de los esfuerzos sistemáticos que buscan acabar con los medios de comunicación independientes. Vemos en directo el proceso de descomposición del sistema democrático. Esto se ha conseguido por medio de la desinformación constante de los ciudadanos a través las llamadas fake news y el envío de correos electrónicos masivos”.
Los oradores coincidieron en que los gobernantes de turno, encabezados por el presidente Zeman, han puesto en marcha un proceso para desmantelar el sistema democrático. Para lograr su cometido recurren a la desinformación aseguró el filósofo Fedor Gál.“Nuestros rivales utilizan la desinformación, la mentira y el odio como consigna en sus campañas electorales, como instrumento de manipulación. Nosotros haremos todo lo contrario, porque nuestro objetivo es una Chequia correcta y decente”.
Gál fue aclamado por los presentes varias veces, pero recibió grandes expresiones de apoyo al decir que las fuerzas a favor del fortalecimiento y respeto de los principios democráticos no tienen que ganar mañana o pasado mañana, lo importante es que no pierdan.