El primer día como miembros de la UE
La República Checa ingresará el 1 de mayo a la Unión Europea y muchos se preguntan, ¿Cómo será ese día?, ¿Amanecerán las calles llenas de banderas azules con estrellas amarillas?, ¿Saldrán los checos a celebrar o será un día como cualquier otro?. Dasa, una joven de Praga, nos cuenta cómo se imagina el primer día como miembro de la Unión Europea y qué expectativas tienen sus compatriotas.
"Creo que hay que distinguir entre los jóvenes y la generación más mayor. Los jóvenes están esperando con mucha ansiedad la adhesión de la República Checa porque muchos de ellos quieren irse a trabajar, para obtener alguna experiencia, a algún país miembro de la UE. Seguro esperan que con la adhesión las cosas mejoren en el país. Pienso que los jóvenes son muy abiertos y tienen un sentimiento positivo hacia la Unión Europea"
¿Crees que tras el 1 de mayo se produzca un cambio muy notorio o va a tomar algún tiempo antes de que se iguale tu país con los países actualmente miembros?"Yo creo que el cambio será muy paulatino, en todo caso más rápido que si la República Checa no fuese miembro de la UE. La gente no se dará cuenta inmediatamente del cambio. No se producirá lo que muchos temen, especialmente las generaciones mayores, que los precios aumentarán violentamente y que el país será invadido por extranjeros, nada de eso pasará"
¿Cómo te imaginas el 1 de mayo?
"Esa es una pregunta que muchos se hacen. Es decir, ¿lo celebraremos, no lo celebraremos?, ¿Será un día normal?, ¿nos levantaremos para ir a trabajar como cualquier otro día? Es difícil decirlo. La gente lo toma como un acontecimiento que viene desde fuera. No somos tan entusiastas como otros países candidatos. Pienso que será un día normal".
Y tu, ¿qué harás ese día?
A mi me gustaría tomar una avión a algún país de los que hoy son miembros, quizá España, sólo por sentir la sensación de formarme en la fila de "miembros de la UE", y no por la de "Resto del mundo". Sólo por ese placer, para poder mostrar mi pasaporte que dice Unión Europea. Nada más.
¿Cómo te sientes de ver casi concluido un proceso que ha tomado varios años, de que finalmente la República Checa ingrese a la Unión Europea?
"Me siento muy feliz, he seguido este proceso todos estos años y lo veo como un hecho positivo, especialmente porque no volverá a ocurrir con mi país lo mismo que sucedió en la entonces Checoslovaquia con la ocupación soviética. Es una garantía de seguridad para los checos".