No se extraerá carbón en la sierra de Beskydy
La mayor compañía minera de la República Checa, la empresa OKD, desistió de su propósito de extraer carbón en la sierra de Beskydy, en Moravia Nororiental. Los pozos de la mina construidos en los años 80 en la ciudad de Frenstát pod Radhostem, al borde de una reserva natural, serán probablemente tapados. Parece que los ecologistas y los vecinos de los pueblos de los alrededores de la mina, que desde hace varios años venían protestando contra los planes de explotación, ganaron la batalla.
La compañía OKD remitió al Ministerio de Industria y Comercio la solicitud de traspasar las reservas de carbón del yacimiento de Frenstát por Radhostem de la categoría de balance a la de no considerada como tal.
La única razón de la decisión es de carácter financiero, indicó el portavoz de la empresa OKD, Radek Chalupa.
"Cada año tenemos que gastar millones de euros para mantener el lugar preparado para la puesta en servicio. Y, naturalmente, no podemos pasar por alto los supuestos elevados costes de la propia explotación".
Las reservas de balance son aquellas con las que la política energética del Estado cuenta a largo plazo. Así que el Estado, que hace veinte años resolvió que se extraería carbón en la sierra de Beskydy, tendrá que decidir ahora que ya no va a contar en sus planes estratégicos con ese carbón.
El cambio de postura de la empresa minera se puede atribuir también, sin duda alguna, a las protestas inequívocas de las once aldeas y poblaciones de la región que serían afectadas directamente por las actividades de la explotación.
Sus alcaldes no ocultan su satisfacción, esperando que el Ministerio satisfaga la solicitud de OKD. El futuro de la sierra de Beskydy y de su entorno debería vincularse con el turismo y no a una explotación del carbón que pudiera perjudicar de modo irreparable al medio ambiente de la región.
La mina en Frenstát pod Radhostem se empezó a abrir en 1981 en el marco de una prospección geológica. Con recursos estatales que rondaron la suma equivalente a 50 millones de euros, los especialistas excavaron los pozos de la mina y levantaron las instalaciones requeridas, incluyendo un depósito de agua, hoteles y viviendas. Desde 1992 todos los edificios del recinto de la mina se han venido conservando. La empresa OKD lleva a cabo sólo el servicio de mantenimiento imprescindible.
Se calcula que en el yacimiento de Frenstát pod Radhostem, que cuenta con una superficie de 63,2 kilómetros cuadrados, hay más de 1, 5 mil millones de toneladas de carbón, 359 millones de toneladas de esas reservas podrían ya ser explotadas.
La empresa OKD no abandonó sus planes del todo ofreciendo como alternativa la explotación del metano de la mina. Sus impactos en el medio ambiente serían considerablemente menores que en el caso de carbón. Pero podría tratarse también de una táctica deshonesta de la compañía, opina Drahomír Strnadel, alcalde del pueblo de Trojanovice, en las cercanías de la mina.
"No estamos de acuerdo con ello. Pues antes de que se empiece a extraer el carbón hay que desgasificar el espacio. Es el paso previo a la extracción de carbón".
En consonancia con la ley minera, la compañía OKD tiene el derecho de explotar el metano que se encuentra en los yacimientos de carbón. Este gas, altamente explosivo, se saca corrientemente de las minas que están en servicio para garantizar la seguridad de los trabajos.
Se supone que en el yacimiento de Frenstát pod Radhostem a una tonelada de carbón le corresponden diez y hasta quince metros cúbicos de metano.
La explotación de metano se vuelve últimamente muy atractiva para la empresa OKD. En 2000 la compañía extrajo más de 110 millones de metros cúbicos de gas. Una tercera parte de ello se utilizó en las minas para producir electricidad y generar calor. El resto fue comercializado.