Director de la TV Nova acusado de nuevo de estafa al acreedor
El director general de la Televisión Nova, Vladimír Zelezný, debe hacer nuevamente frente a acusaciones de estafa a su acreedor, la compañía Central European Media Enterprises (CME). El motivo de ello son las sospechosas transferencias de su patrimonio, con las cuales intentaría evitar el pago de sus compromisos respecto a su acreedor después de que éste recurriera contra Vladimír Zelezný al arbitraje internacional, en abril 1999.
La policía checa detuvo al magnate televisivo, de 56 años de edad, junto con sus dos abogados, Ondrej Kuchar y Edita Panusková. Después de 12 horas de interrogatorio, Vladimír Zelezný fue puesto en libertad, ya que, según la policía, no persiste el peligro de que pueda influir en los coacusados y se reunió material suficiente para iniciar un procedimiento penal contra él. A mediados de junio de 1999 Vladimír Zelezný transfirió sus bienes inmuebles estimados en más de tres millones de dólares, a dos sociedades anónimas. Estas se encargaron de administrar la villa familiar del entonces matrimonio Zelezný en el selecto barrio praguense de Stresovice, dos edificios en el centro de Praga, en uno de los cuales se encuentra una galería que custodia cuadros cuyo propietario fue también el director de Nova, y los terrenos e inmuebles situados en las cercanías de la ciudad de Mikulov, en Moravia del Sur.
Los abogados de Vladimír Zelezný organizaron una serie de transferencias. Cada uno de los inmuebles transferidos fue patrocinado por una compañía independiente en cuyas juntas directivas figuraban los abogados del jefe de Nova.Al reducir de este modo su patrimonio, Vladimír Zelezný y sus abogados se expusieron a la sospecha de no querer satisfacer sus obligaciones respecto al acreedor. Según el veredicto del Tribunal Internacional de Arbitraje de febrero del año pasado, el director de Nova debe pagar a la compañía estadounidense CME una indemnización de casi 23 millones de dólares.