Nobel de la Paz, unión bancaria y licor envenenado

Foto: Comisión Europea

La espontánea reacción del presidente checo, Václav Klaus, al enterarse del premio Nobel de la Paz concedido a la Unión Europea; la negativa del Gobierno checo de sumarse a una unión bancaria europea; el alcohol adulterado vuelve a aparecer; y el pobre empate checo ante Bulgaria, en el camino a Brasil 2014.

Václav Klaus,  foto: Archivo del Gobierno checo
El presidente Václav Klaus no tardó en dejarse oír el pasado viernes tras saberse que el Nobel de la Paz había sido otorgado a la Unión Europea, por sus contribuciones durante seis décadas “al avance de la paz y la reconciliación, la democracia y los derechos humanos en el continente”.

“De verdad pensé que era un bulo, una broma o un chiste. No podía ni en sueños imaginar que alguien lo pensara en serio”, dijo Klaus, antes de volver a arremeter contra la decisión del Comité Nobel Noruego.

“Creo que es un trágico error. El Premio Nobel se daba a individuos, a una persona en concreto por una acción determinada, una sola. Dárselo a una institución, además burocrática en este caso, es un reconocimiento vacío. No sé si hay alguien pensando en ir a recogerlo”.

Parecidas críticas al Nobel de la Paz 2012 llegaron desde el presidente en la Eurocámara de la Alianza de Conservadores y Reformistas Europeos, el también checo Jan Zahradil, o el eurodiputado euroescéptico británico Nigel Farage y el controvertido político holandés Geert Wilders.

El ministro de Asuntos Exteriores checo, Karel Schwarzenberg, sin embargo aplaudió la decisión, porque “la Unión Europea ha ayudado a que los grandes Estados del Viejo Continente solucionen sus problemas de forma pacífica”, dijo.

Aún así añadió Schwarzenberg que hubiera preferido que se lo llevara un individuo.


Petr Nečas,  foto: ČTK
El Gobierno checo está convencido de que el sector bancario del país está sano así que no existe motivo para someterlo a una supervisión a nivel europeo.

Petr Nečas rechazará el nuevo proyecto comunitario que supone que el Banco Central Europeo se encargaría de supervisar unos seis mil bancos del Viejo Continente, y tendría el derecho de concederles la licencia por un lado, y penalizar y hasta cerrar las instituciones indisciplinadas, por otro.

El jefe del Gobierno checo destacó que está dispuesto a negociar sobre el tema, pero que la versión actual del proyecto es para él inaceptable.

“El 95% del mercado bancario checo es controlado por empresas madre desde el exterior. Eso nos obliga a ser precavidos respecto a cualquier regulación. Difícilmente podemos dar nuestro visto bueno a los préstamos obligatorios entre los respectivos fondos nacionales de garantía de depósito, según está previsto. Si no se solucionan estos problemas de manera que esté garantizada la estabilidad del sector financiero checo, estoy dispuesto a bloquear la propuesta”.

El primer ministro aseguró que Chequia no es el único país que se opone al nuevo sistema europeo bancario.

“No estamos aislados. Una postura parecida adopta también Holanda y Suecia. Es decir que existe una coalición más amplia respecto al tema. Reitero que si el proyecto de la unión bancaria no es modificado, seguramente lo vamos a vetar”, insistió.

Petr Nečas agregó que una futura modificación del sistema bancario comunitario incluso podría obligar a la República Checa a anular su compromiso de introducir el euro. Además, tildó de irrealista el plan de poner en marcha el nuevo sistema de supervisión bancaria europea a partir de enero de 2013, como está previsto.


Foto: Radio Praga
En las últimas semanas, el alcohol adulterado se ha cobrado en el país 28 víctimas. A pesar de las medidas tomadas por el Gobierno sobre la venta y distribución de licores, el peligro de intoxicación sigue vigente.

El martes pasado fueron halladas en la ciudad morava de Zlín unas 30.000 botellas con un contenido sospechoso. Más de 7.600 contenían un alto nivel de metanol.

Pavel Kopřiva, portavoz de la Inspección Estatal de Agricultura y Alimentación, aporta más detalles acerca del descubrimiento.

“Los aduaneros hallaron botellas sospechosas con etiquetas de la empresa Likérka Drak en un almacén en una zona industrial de la ciudad de Zlín. El análisis mostró que la mitad de alcohol en los licores era metanol. Se trata de una concentración muy alta y muy peligrosa. Las botellas contaban con sellos oficiales y estaban listas para la distribución en la red de las tiendas de alimentación”.

Pavel Kopřiva agregó que en el almacén fueron hallados en total más de 56.000 litros de alcohol ilegal. Por el momento, la Policía trata de averiguar su origen y espera los resultados de los análisis de laboratorio que determinarán la presencia de metanol.

El gerente de la empresa Likérka Drak, cuyas etiquetas aparecen sobre las botellas incautadas, fue detenido el miércoles, sin embargo niega cualquier responsabilidad por el contenido tóxico.

Unas etiquetas falsas de la empresa Likérka Drak fueron detectadas en septiembre pasado sobre licores adulterados. No obstante, las botellas encontradas en el almacén de Zlín son productos originales de la licorería, indica Pavel Kopřiva.


La selección checa no salió del empate a cero frente a Bulgaria,  foto: ČTK
En un partido aburrido jugado en el estadio del Sparta de Praga el martes, la selección checa de fútbol volvió a mostrar su impotencia goleadora y no salió del empate a cero frente a una sólida Bulgaria que incluso se creó algunas ocasiones para llevarse los tres puntos de la capital checa.

La falta de puntería checa es alarmante. Excepto la victoria de 3-1 lograda por el cuadro nacional en la jornada anterior frente a la modesta selección de Malta, los checos no han logrado marcar en su quinto partido consecutivo.

Una vez terminado el choque, el frustrado seleccionador Michal Bílek sacó una larga lista de las deficiencias del juego de sus pupilos.

“No logramos imponernos por las bandas. La defensa búlgara ha sido muy compacta y nuestros atacantes no se atrevían a buscar espacio en un uno contra uno, les faltó más coraje. Perdíamos el balón fácilmente y sudamos demasiado para recuperarlo. En la primera parte nos faltó precisión en la combinación y esperaba que creásemos más peligro al atacar por la banda derecha”.

Mientras Bílek señaló las deficiencias del rendimiento checo, el portero Petr Čech destacó la calidad del contrincante.

“Bulgaria controló muy bien el balón y cortó nuestro esfuerzo de tomar la iniciativa. El tiempo transcurría rápido sin que pasara algo. Además, el terreno estaba difícil, los jugadores se resbalaban, lo que causó problemas a ambas partes. A fines del partido hemos creado presión pero, por desgracia, no logramos empujar la pelota a la red”.

La selección nacional permanece en tercer lugar del grupo B, con cinco puntos, uno menos que Bulgaria y cinco por debajo del líder de la clasificación, Italia, que derrotó en casa a Dinamarca por 3-1.