Los delitos cometidos durante el estado de emergencia pueden salir muy caros
Dos años de cárcel por robar tres salchichones y vino. Condenas de este tipo se han visto en Chequia por delitos cometidos durante el estado de emergencia. Algunos legisladores consideran que son exageradas.
Durante el estado de emergencia establecido en Chequia a causa de la pandemia de coronavirus, la ley establecía que los delitos serían condenados con penas más estrictas.
Uno de los casos que más ha llamado la atención de los medios es el de un hombre de Brno que robó embutidos y vino por un valor total de unos 20 euros. No obstante, dado que era reincidente y que el robo tuvo lugar durante el estado de emergencia, se enfrentaba a hasta ocho años de prisión. Al final, fue condenado a dos años.
Para la jueza de este caso, Dana Kancírová, es difícil justificar que los productos robados sean de primera necesidad y que el delito se deba a una situación desesperada.
“El robo de vino y embutidos no tiene el carácter propio de una situación en la que alguien se está muriendo de hambre”, según indicó Kancírová.
Otro caso fue el de un hombre que robó cinco bollos de pan, algo por lo que en condiciones normales habría sido condenado a medio año de cárcel. Sin embargo, ha recibido una pena de año y medio de prisión.
Petra Žilková, abogada defensora de este acusado, considera que es demasiado para un robo que se produjo por la necesidad de comer.
“Nos parece una condena desproporcionada por el robo de cinco bollos de pan, teniendo en cuenta que lo hizo por un motivo existencial”, añadió la abogada Žilková.
Son muchos los legisladores que han alzado la voz contra estas situaciones, y que admiten que las penas establecidas durante el estado de emergencia han sido exageradas. Políticos de la oposición parlamentaria como Zbyněk Stanjura, presidente del grupo parlamentario del Partido Cívico Democrático, declaró que le parece innecesario que alguien vaya a la cárcel por robos que no suelen superar los 20 o 30 euros.
Por su parte, la líder del partido TOP 09, Markéta Pekarová Adamová, cree que el Ministerio de Justicia debería hacer algunas reformas en este sentido, según dijo a la Televisión Checa.
“La Justicia no debería permanecer ciega y debería mostrarse más sensible. Se han comprado elementos sanitarios a China por precios excesivos y eso apenas se investiga, pero una persona puede ir a la cárcel por robar pan”.
Aunque el Ministerio de Justicia no se plantea ningún cambio por el momento, y aclaró a través de su portavoz, Vladimír Řepka, que considera adecuadas las penas establecidas para los delitos cometidos durante el estado de emergencia.
Durante dicho periodo establecido por el Gobierno del 12 de marzo al 17 de junio, en Chequia se registraron 8354 robos. De ellos, ya se han iniciado procesos judiciales contra unos 1000 casos.
Otro de los aspectos que preocupa a algunos especialistas es la superpoblación de las prisiones checas, que con el encarcelamiento de nuevos presos por pequeños delitos solo puede empeorar.
Los últimos datos indican que en la República Checa hay 160 presos más de los que oficialmente pueden acoger las cárceles nacionales.