Las inversiones extranjeras crearon en Chequia 10.000 nuevos puestos de trabajo en 2013

Foto ilustrativa: Tomáš Adamec

Las inversiones realizadas en el sector industrial, sobre todo el automovilístico, durante 2013, produjeron en Chequia unos 10.000 nuevos puestos de trabajo. El capital extranjero se sintió atraído sobre todo por los incentivos a la inversión que ofreció el Gobierno.

Marian Piecha,  foto: Czechinvest
La agencia gubernamental Czechinvest termina el año 2013 con un saldo especialmente positivo. Después de gastar unos 480 millones de euros en incentivos, consiguió atraer al país inversiones que generaron 10.448 nuevos puestos de trabajo, el doble de lo logrado en 2012.

Estos estímulos consisten básicamente en subvenciones a la creación de puestos de trabajo y formación o recualificación de los trabajadores. Además, se trata de ayudas con un horizonte a medio plazo, como explica el director de Czechinvest, Marian Piecha.

“Los nuevos inversores tienen la posibilidad de aprovechar estos estímulos durante los próximos diez años, y en ese caso no pagar impuestos por estas actividades”.

Foto ilustrativa: Tomáš Adamec
De los nuevos proyectos que se realizaron en 2013, la mayor parte tienen que ver con la industria automovilística. Entre ellos destaca la transformación de la planta de Škoda en el pueblo de Vrchlabí, unas obras presupuestadas en 150 millones de euros y cuyo objetivo es cuadriplicar la producción.

La segunda mayor inversión es la de la empresa de neumáticos Continental Barum, que alzará una nueva fábrica en Otrokovice, en la región de Zlín, y que se espera cree 300 nuevos puestos de trabajo. En Jihlava la compañía Automotive Lighting abrirá una nueva planta de reflectores, y se espera que en los próximos años invierta 75 millones de euros y dé trabajo a 200 personas.

Los automóviles seguirán protagonizando las inversiones extranjeras en la República Checa durante 2014. Se espera por ejemplo el desembarque de la japonesa Fukoku, el mayor fabricante de gomas para limpiaparabrisas, que espera abrir una planta en Litoměřice, en Bohemia del Norte. Los japoneses piensan iniciar la producción en 2015 y gastar en el proyecto 2,2 millones de euros.