Las facilidades de los cajeros automáticos en Chequia
Hacer una parada rápida para retirar dinero es una cosa usual y, sin duda, se aprecia cuando tenemos los cajeros al alcance. En la República Checa su cantidad ha aumentado considerablemente, así como sus funciones que son cada vez más innovadoras y seguras.
En la estación de metro Budějovická, al sureste de Praga, en lo que corresponde a su área comercial hay, por ejemplo, cinco cajeros automáticos, cada uno de una casa bancaria diferente. Lukáš Kropík, portavoz del banco Česká spořitelna, describe, entre otras cosas, el modelo de uno de los cajeros.
"Nos encontramos frente a un tipo de cajero automático moderno, que permite aprovechar las opciones de retiro sin contacto. Eso significa que usted aquí no mete la tarjeta en ninguna ranura que podría tener instalado algún tipo de lector que registre los datos de su tarjeta. Esta es una de las formas de fraude más comúnes, a través del llamado skimming se roba su información personal de las tarjetas".Si bien la seguridad es uno de los aspectos que se toman en cuenta a la hora de instalar un cajero, también es una forma que han encontrado las instituciones bancarias para multiplicar sus servicios a la vez que ahorran en gastos de personal. Además de hacer un único pago, también se pueden establecer ordenes de pago permanentes. Ello solo a través de la pantalla.
Según las cifras manejadas por la Asociación para Tarjetas Bancarias hay más de 5500 cajeros en todo el territorio nacional y la ubicación de estos es un asunto estratégico.
"Cuando elegimos una ubicación nos fijamos principalmente en los sitios donde nuestros clientes retiran de cajeros de otros bancos. Alrededor de unos setenta cajeros ofrecen la operación de depósito, es decir, los clientes pueden gratuitamente hacer depósitos de efectivo a sus cuentas. La novedad en la que estamos trabajando ahora son los retiros sin contacto y también con la ayuda de celulares inteligentes", explica Jana Karasová, portavoz del banco Air Bank.Ya, de hecho, hay bancos que tienen aplicaciones para detectar los cajeros más cercanos a la localización concreta de sus usuarios en determinado momento, una especie de GPS que navega hacia estas máquinas dispensadoras de dinero.
Otros bancos han pensado en un tipo específico de cliente, por ejemplo, los conductores, quienes podrían perder tiempo dando vueltas a la caza de un puesto solo para hacer un retiro rápido, han visto sus problemas resueltos con los autocajeros.
En la medida en que aumenta el número de cajeros, las personas van poco a poco acostumbrándose a todas las posibilidades que sus bancos les ofrecen, ya sea en la máquina misma o desde el teléfono.