La Sociedad Checa de Micología cumple 100 años
A los checos les encanta recoger hongos. En ningún otro sitio del mundo salen tantas personas a los bosques para llenar cestas de diferentes tipos de setas que después fríen, secan o encurten.
La recolección de setas es un pasatiempo que apasiona a los checos desde hace siglos. Una de las personas que ayudó a popularizar la actividad fue František Smotlacha. Este gran conocedor de los hongos fundó un consultorio micológico que se encargaba de ayudar a los seteros vacilantes a identificar hongos comestibles. En 1921 fundó la Sociedad Checoslovaca de Micología. Su obra magistral fue el Atlas de los hongos comestibles y no comestibles, publicado a mediados del siglo pasado, que se convirtió en una especie de biblia para los apasionados de la actividad.
La Sociedad Checa de Micología funciona hoy en día en más de 40 lugares a lo largo y ancho del país. Organiza diferentes actividades como conferencias o exposiciones y se enfoca asimismo en la protección de los sitios amenazados.