La República Checa recibirá a refugiados de Siria
Las autoridades de la República Checa acordaron recibir a unas 15 familias de refugiados sirios. La propuesta fue presentada por el Ministerio del Interior y respaldada en la sesión del Consejo de Ministros de este miércoles.
Jitka Škovránková, de la organización humanitaria checa Hombre en Emergencia, aseguró que con la llegada del invierno la situación ha empeorado terriblemente.
“La gente se está muriendo de frío. Las fuertes nevadas y las bajas temperaturas de los últimos días se cobraron tres vidas humanas. Los refugiados viven en tiendas de campaña que no están acondicionadas para el invierno”.
Además de los refugiados que se encuentran en los campamentos, millones de personas permanecen en Siria en viviendas improvisadas.
Varios países europeos, en primer lugar Alemania, insisten en la urgencia de ayudar a los sirios. Países como Jordania, Líbano, Irak y Turquía aseguran que tienen dificultades para atender a tantos refugiados.La República Checa se suma al programa de ayuda. En un principio dio a entender que no quería refugiados en su territorio, que prefería enviar ayuda humanitaria al lugar en que se encuentran.
Gracias a la nueva propuesta del Ministerio del Interior Chequia recibirá a unas 15 familias sirias, pero con la condición de que sean cristianas. Se trata de familias con niños urgidos de atención médica. Los menores viajarían a Chequia acompañados de sus familiares, en total unas 70 personas.
Klára Boumová, representante de Cáritas de la República Checa, recordó que la situación de los sirios es alarmante. Por ejemplo en Jordania unos 600 mil sirios viven en la miseria absoluta.“La mayoría de los refugiados viven fuera de los campamentos, ya que éstos no disponen de la capacidad suficiente. Se encuentran registrados en las listas de refugiados, pero habitan garajes, almacenes abandonados y los sitios menos esperados”.
El ministro del Interior, Milan Chovanec, dijo que resulta indispensable que los niños escogidos dispongan de alguna predisposición para su ulterior integración a la sociedad checa, mientras que los adultos deberán demostrar que nunca han mantenido vínculos con organizaciones radicales.