La Praga del maňana, una exposición sobre los cambios urbanísticos de la capital checa
Praga, considerada una de las ciudades más bellas de Europa ha sabido mantener intacta su belleza durante siglos. Cada nuevo edificio o urbanización se planean con mucho tacto y precisión de relojero. Una exposición del Instituto de Planificación y Desarrollo de Praga ofrece estos días un vistazo a la ciudad del maňana.
Respetada primero por los nazis y después por los comunistas, la ciudad de Praga ha mantenido una hermosura y encanto que la sitúan entre las más bonitas de Europa. Los daňos durante la Segunda Guerra Mundial fueron mínimos y los comunistas no se atrevieron a imponer la llamada arquitectura estalinista.
Sus callejuelas retorcidas, palacios, monumentos y ambiente de cuento de hadas, han convertido a la capital checa en el destino predilecto de millones de turistas del mundo entero. También le han puesto el ojo productores y directores de cine que han aprovechado los exteriores para películas históricas como por ejemplo Amadeo o la de acción Misión Imposible, entre muchas más.
Praga es también una ciudad moderna, que se desarrolla al ritmo de las necesidades del siglo XXI. El Instituto de Planificación y Desarrollo de la ciudad ha preparado una exposición sobre los mayores cambios que esperan a la ciudad los próximos aňos.
El director del Instituto de Planificación y Desarrollo de Praga, Ondřej Bohač, adelantó a la Televisión Checa que en el futuro no muy lejano se cuenta con barrios nuevos, rehabilitación de calles, plazas y puentes.
“El puente Dvorecký comenzará detrás de Žluté Lázně, a poca distancia de la piscina de Podolí, continuará en diagonal a través del río Moldava hasta el barrio Praga 5 a un lugar llamado Lihovar”.
Se planea la reconstrucción del Centro de Congresos, la edificación de una nueva sala de conciertos para 1600 espectadores, la contrucción de la línea D del Metro, una conexión ferroviaria hasta el aeropuerto y el barrio nuevo Bubny-Zatory.
“Debe ser un barrio que permita hacer realidad el paradigma de la corta distancia en la ciudad. Donde se pueda vivir, trabajar y encontrar entretenimiento", dijo a la Televisión Checa Petr Hlaváček, vicealcalde capitalino.
Los tranvías deberían desaparecer de la Plaza de la Victoria, en Praga 6 y ceder su lugar a zonas verdes. Las céntricas calles Revoluční y Národní deberían cambiar de aspecto, porque históricamente abarcaron una destacada zona comercial.
En la actualidad el lugar mantiene su importancia comercial, pero de acuerdo con los expertos es necesaria una profunda adaptación en la que se incluyen zonas verdes, una mejor conexión entre las dos calles, así como mejorar las condiciones para los peatones y vehículos.
Por medio de fotografías e ilustraciones de grandes dimensiones, la exposición del Instituto de Planificación y Desarrollo de Praga ofrece a los interesados un panorama del aspecto que tendrá la capital checa en un futuro próximo.