La pandemia complica la situación laboral de los jóvenes

La cifra de jóvenes en paro que se registró a finales de 2020 ha sido la más alta en cuatro años en Chequia. La situación de este grupo demográfico se complica por la pandemia en el mercado laboral.

Cada vez más personas jóvenes sienten el impacto del coronavirus también en su vida laboral. Casi 36 000 menores de 24 años se encontraban sin trabajo a finales del 2020. La tasa de paro, que es la más alta en cuatro años.

Foto ilustrativa: Anna Kottová,  Český rozhlas

La interrupción de la actividad económica en varios sectores por el coronavirus ha ocasionado que los jóvenes se vean obligados a competir por los puestos disponibles con trabajadores con más experiencia que han perdido su empleo y buscan uno nuevo.

“En sus esfuerzos de conseguir un nuevo trabajo cuanto antes que les asegure ingresos estables, las personas que perdieron su trabajo el año pasado y tienen más experiencia laboral empiezan a ocupar también posiciones de perfil junior”, explica Michal Novák de la agencia de recursos humanos Profesia.

También las limitaciones al aprendizaje que han supuesto las medidas gubernamentales complican el desarrollo profesional de los jóvenes. La enseñanza práctica se ha interrumpido, por lo que muchos estudiantes no tienen donde ganar la experiencia necesaria que, en tiempos normales, mejoraría sus perspectivas de entrada en el mercado laboral.

Foto  ilustrativa: vicwag,  Pixabay,  Pixabay License

“En mi opinión, no tendrán las mismas o capacidades o la misma formación que cuando asisten a clases durante todo el año”, afirma Miroslav Hynouš, encargado de una empresa de la capital que suministra instalaciones sanitarias técnicas. En su empresa suelen ofrecer prácticas a estudiantes y cada año terminan empleando a dos o tres. Hynouš supone que ahora la empresa tendrá que buscar candidatos en otro sitio.

El número de jóvenes menores de 24 años en paro que se registró en diciembre, supone una subida interanual del 40%. De acuerdo con la Oficina de Trabajo de la República Checa, entre los desempleados figuran cada vez con mayor frecuencia graduados de escuelas secundarias y escuelas de formación profesional, principalmente de los centros enfocados en estudios económicos, administrativos, de gastronomía, hotelería, comercio, y servicios como peluquería.

Autor: Romana Marksová
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