La lanzadora de jabalina Spotáková toma el relevo de Zelezný
El acontecimiento número uno en cuanto al atletismo checo ha sido este año sin duda la despedida del lanzador de jabalina Jan Zelezný. Los atletas checos trajeron del Campeonato Europeo de Gotemburgo, Suecia, un total de cuatro medallas. Zelezný concluyó su carrera profesional, conquistando al norte de Europa la medalla de bronce.
El atleta checo ha sido uno de los mejores lanzadores de jabalina a nivel mundial en toda la historia: es triple campeón olímpico y tres veces fue campeón mundial. Además, sigue siendo plusmarquista mundial: en 1996 estableció la increíble marca de 98,48 metros.
Zelezný consiguió su primer trofeo en 1987. Hace cinco años cuando se proclamó por última vez campeón mundial en Edmonton, Canadá. Posteriormente lucharía contra una serie de lesiones y parecía que jamás volvería al podio de los ganadores. Pero Zelezný no se rindió y este año triunfó, a pesar de conseguir solamente la presea de bronce.
En todo caso, entre los lanzadores de jabalina checos creció un formidable sucesor de Zelezný, mejor dicho sucesora: Barbora Spotáková consiguió en este Campeonato Europeo la medalla de plata y dominó, además, en la Final Mundial de Atletismo en Stuttgart, Alemania. Sus rendimientos tienen tendencia ascendente, este año mejoró tres veces la marca nacional.
En las demás disciplinas, Tomás Janku brilló en la prueba de salto de altura, conquistando la medalla de plata y además, la selección de atletismo checa se puede fiar tradicionalmente del decatlonista Roman Sebrle, quien se adjudicó la medalla de oro.
Con excepción de Jan Zelezný, se espera que estos tres atletas defiendan sus posiciones también en el Mundial que tendrá lugar el próximo año en Japón.