La inflación bajó un 2,3% en el mes de julio

Foto ilustrativa: Klára Stejskalová

El precio de los bienes de consumo tuvo en el mes de julio un aumento interanual del 2,3%, una disminución de 0,3 puntos en comparación con el mes anterior. Según la Oficina Checa de Estadísticas (ČSÚ) se espera que la inflación vuelva a subir.

Foto ilustrativa: Klára Stejskalová

El nivel de inflación registrado en el mes de julio se explica sobre todo debido a la evolución de los precios dentro del sector inmobiliario. Los arriendos han aumentado un 3,2% y los impuestos del agua y el alcantarillado también han sido reevaluados. La electricidad ha subido de precio un 5%. Adicionalmente, los lugares de recreación y las propiedades culturales han aumentado sus costos al igual que el alcohol y el tabaco.

Sin embargo, los precios de ciertos bienes han disminuido, especialmente los textiles y los servicios de telecomunicaciones. De igual forma, los productos alimenticios y las bebidas no alcohólicas son menos caras en un 0.1% comparado con el año anterior. Cabe resaltar que una excepción es la mantequilla, que ha visto un aumento del 4,2%.

La baja de inflación deberá ser temporal según los analistas citados por la agencia de noticias de la ČTK. Estos piensan que se deberá mantener en los próximos meses en un rango entre el 2 y el 2,5%. Según ellos, la inflación ha cambiado de naturaleza últimamente, lo cual estaría menos relacionado con los fenómenos estacionales y se explicaría más debido al nivel de consumo en los hogares.