La gripe aviar se convierte en un "buen negocio"
Un riguroso control aduanero de la carga de los camiones en la frontera checa, una mayor protección de las grandes granjas de aves de corral y otras medidas contra la gripe aviar han entrado en vigor en la República Checa. Después de haber sido detectada la enfermedad en varios países vecinos, es muy probable que aparezca pronto también en el territorio checo.
"Consideramos que no hay motivo para obligar a los pequeños avicultores a adoptar las mismas medidas a las que se recurre en las grandes granjas. Les recomendamos únicamente que en caso de cualquier sospecha o aparición de algún ave muerta, contacten de inmediato al centro veterinario más cercano".
Josef Duben apuntó que, en caso de ser detectado un brote de la enfermedad en territorio checo, también los pequeños granjeros estarían obligados a intensificar las medidas de prevención, en concordancia con las normas de la Unión Europea.
Los veterinarios checos exhortan a un mayor cuidado, asimismo, a los propietarios de perros y gatos. Indican que estos animales suelen cazar aves y fácilmente podrían contagiarse con el virus mortal de la gripe aviar. Según los expertos, en Asia perecieron varios tigres después de haber consumido aves contagiadas por la gripe aviar.
El temor de los habitantes de Europa ante la proliferación de la enfermedad se convierte paradójicamente en un buen negocio. Grandes ganancias registran las empresas farmacéuticas productoras de vacunas contra la enfermedad, así como de mascarillas para hospitales, y las fábricas de aparatos de aire acondicionado con filtros especiales antivirus. Y se espera también un aumento del precio de la carne vacuna y porcina en vista del previsto crecimiento de su demanda en los próximos meses.