La Fuerza Aérea checa depende en parte de suministros e instructores rusos

A pesar de las malas relaciones que atraviesan Chequia y Rusia, el Ejército checo quiere dejar en manos rusas el mantenimiento de algunos de sus aviones.

El Gobierno checo informó a mediados de abril que disponía de informaciones sobre la participación de agentes del servicio militar ruso en explosiones en un depósito de municiones en la localidad de Vrbětice en 2014 que se cobraron la vida de dos ciudadanos checos.

Jiří Šedivý | Foto: Archivo del Instituto CEVRO

Tras aquel anuncio, las deterioradas relaciones entre Praga y Moscú empeoraron aún más después de la expulsión de diplomáticos de ambos países y Rusia metió a la República Checa en una lista de países enemigos que incluye también a EE.UU.

De acuerdo con informaciones de la Radio Checa, el Ejército quiere dejar en manos rusas el mantenimiento de algunos de sus aviones y el entrenamiento de pilotos de helicópteros de producción rusa.

El antiguo jefe del Estado Mayor, Jiří Šedivý, dijo a la Radio Checa que la crisis pone de manifiesto la necesidad de desvincularse de Rusia.

“El aumento de la tensión entre Praga y Moscú indica que debemos evaluar nuestra dependencia militar de Rusia y poner fin a este tipo de vínculos”.

El militar retirado dijo que al lado de las aeronaves de producción rusa, el Ejército depende de los instructores rusos y eso puede representar un peligro para la seguridad nacional.

Jana Zechmeisterová | Foto: Ejército Checo

“Existe el riesgo de que los instructores rusos recluten a ciudadanos checos en los centros de entrenamiento, y a partir de ahí tendríamos un problema serio”.

Según informaciones de la Radio Checa, el Ministerio de Defensa confirmó que se está preparando la firma de un nuevo contrato para que los rusos sigan ofreciendo mantenimiento a las aeronaves y adiestrando pilotos, indicó la portavoz ministerial Jana Zechmeisterová.

“Se han iniciado los pasos previos para concluir una relación contractual con una fecha límite que no ha de ir más allá del año 2021“.

La portavoz del Ministerio de Defensa declaró que desde el punto de vista de dicha cartera no hay motivo alguno para rescindir el contrato con la empresa HTP Ostrava.cz, encargada de los entrenamientos. “Todos los miembros de la Junta Directiva y Junta de Supervisión, así como los empleados que entran en contacto con la tecnología militar, tienen el nivel requerido de autorización de seguridad de la Oficina de Seguridad Nacional", comentó Zechmeisterová.

Los soldados checos también dependen de empresas rusas para la reparación, mantenimiento y suministro piezas de repuesto para los helicópteros de la serie Mi, originalmente soviéticos, así como para aviones turbohélice L-410. Aunque muchas piezas se elaboran en la República Checa, la fábrica de Kunovice está en manos rusas desde hace mucho tiempo.

Avión turbohélice L-410 | Foto: Aircraft Industries

La Fuerza Aérea checa tiene en este momento más de 20 helicópteros rusos Mi, la mayoría con licencias para volar hasta el año 2040, además de seis aviones L-410 con una vida útil hasta 2032.

Como parte del programa de modernización de las Fuerzas Armadas, el Ministerio de Defensa compró 12 helicópteros Bell de Estados Unidos.