“La convocatoria de elecciones va contra los partidos de la oposición”
El presidente de la República Checa, Miloš Zeman, sorprendió durante las fiestas de Navidad convocando las próximas elecciones Parlamentarias para los días 8 y 9 de octubre de 2021. Juristas y analistas coinciden en que tanta antelación perjudica a las coaliciones electorales que se están formando entre la oposición.
No había sucedido hasta la fecha que supiéramos la fecha exacta de unas elecciones parlamentarias con casi diez meses de antelación. El presidente Zeman lo justificó argumentando que así los partidos tendrían más tiempo para prepararse. Expertos, sin embargo, creen que la clave está en la ley electoral de 2016 y la formación que se está produciendo de dos grandes coaliciones de partidos para derrotar el gobierno de Andrej Babiš y su movimiento ANO.
Según la mencionada ley electoral, cada candidatura puede gastar un máximo de unos 3,5 millones de euros para cubrir todos los gastos de propaganda desde la convocatoria de elecciones hasta su celebración.
Para el profesor de la Facultad de Derecho de la Universidad Carolina de Praga Jan Wintr, hay un fallo evidente en la ley electoral, que establece que no se pueden convocar los comicios con menos de 90 días de antelación, pero no especifica el plazo máximo.
“Quienes redactaron así esta norma de la ley electoral y limitaron los gastos de la campaña no contaron con que el presidente convocara las elecciones con casi un año de antelación. Ahora se demuestra que la redacción es desafortunada. La ley no está preparada para algo así”.
Con dos o tres partidos de la oposición unidos en cada candidatura y nueve meses de plazo, muchos piensan que la intención real del presidente es invisibilizar estas opciones.
En sus declaraciones a la Radio Checa, el profesor Wintr también señaló que el primer ministro, Andrej Babiš, no puede mostrarse sorprendido por la convocatoria de elecciones, cuando él mismo ha tenido que ratificarla tras la firma del presidente.
En cuanto a las coaliciones mencionadas, estas en realidad no están cerradas definitivamente. Por un lado, la más fuerte según las encuestas, que auguran incluso que superaría en votos al movimiento ANO, uniría al Partido Pirata y a Alcaldes e Independientes.
El líder de los Piratas, Ivan Bartoš, asegura no estar preocupado por este movimiento del presidente, dijo a la Radio Checa.
“Desde hace mucho defiendo que la mejor campaña son los hechos y el trabajo de los políticos, tanto en los ayuntamientos como en el Parlamento. No veo ninguna limitación importante”.
Por su parte, Martin Kupka, vicepresidente del Partido Cívico Democrático, que debería ir a las elecciones junto a TOP 09 y el Democristiano Partido Popular, sí reconoce que esto les complica la campaña. A la Radio Checa recordó otros episodios anteriores del presidente Zeman en campañas electorales.
“Por parte del presidente es evidente que hay algo de malevolencia. Recordamos sus campañas electorales por los pueblos con carteles contra sus rivales políticos. Es algo innecesario por su parte que no beneficia a nadie, solo perjudica”.
El politólogo Josef Mlejnek, de la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Carolina de Praga, opina, sin embargo, que el concepto de “campaña” es bastante complicado de establecer, lo que permitirá a los partidos saltarse con bastante facilidad el límite de gasto. Un buen abogado bastará, dice Mlejnek, para arreglar una campaña de cada partido bajo sus propios logos –y límites de gasto– para no verse perjudicado a pesar de ir en coalición.