Falleció el actor checo Vlastimil Brodský
La cultura checa perdió a una de sus más destacadas figuras del arte teatral y fílmico de la segunda mitad del siglo XX: Vlastimil Brodský. Falleció repentinamente el sábado pasado, a la edad de 81 años.
Muy típico era para Brodský el humor negro, con el que comentaba en los últimos años también sus enfermedades y el acercamiento de la muerte. Al recibir hace un mes el premio fílmico "León checo", Vlastimil Brodský, pese a su serio estado de salud, provocaba risas del público presente.
"Debido a que mi salud es muy frágil y a que quisiera estar vivo hasta al fin de esta velada, seré realmente muy breve - gracias a todos ustedes."
Vlastimil Brodský nació el 15 de diciembre de 1920. Fue amante de las películas con el célebre bailarín estadounidense Fred Astair, por lo que aprendió a bailar como él y actuaba en varios bares de Praga. Sus primeras experiencias como actor las adquirió durante la Segunda Guerra Mundial en el teatro capitalino E.F.Burian. Después de la liberación fue uno de los fundadores del Teatro de la Sátira. En 1948 se incorporó en el elenco del Teatro de Vinohrady, de Praga, donde hasta su retiro fascinó al público con su extraordinaria maestría y talento artístico.
Vlastimil Brodský actuó en decenas de películas, muchas de la cuales permanecerán para siempre en los anales de la cinematografía checa. Entre ellos figuran "Todos los paisanos buenos", de Vojtech Jasný, así como "Los trenes rigurosamente vigilados" y "Soledad demasiado ruidosa", de Jiri Menzel. Como uno de pocos actores checos cosechó laureles también en el exterior. Fue galardonado con el premio Oso de Plata en el festival internacional de Berlín y conquistó también la Nimfa de Oro en Monte Carlo. En 1998, Brodský fue galardonado con el premio teatral Thalía por su aporte y en 2002 recibió el premio fílmico "León checo" por el mejor papel masculino.