En el Conservatorio de Praga estudiaron la maravillosa contralto del siglo XIX Henrietta Sontag y el célebre autor de operetas Franz Lehár

El Conservatorio de Praga es uno de los centros docentes de su género más antiguos de Europa. Sus puertas se abrieron a los alumnos el 24 de abril de 1811. El Conservatorio surgió gracias a la iniciativa de hidalgos y burgueses amantes de la música que echaban de menos en la vida musical de Praga una buena orquesta, compuesta por músicos con buena calidad y por eso decidieron fundar un centro que formase a tales músicos.

En la primavera de 1808 se reunió en Praga la Sociedad para la promoción de la música en Bohemia que emitió la siguiente declaración:

"El arte musical antaño tan floreciente en Bohemia, sufrió tal declive que en Praga sólo con dificultad es posible formar una buena orquesta completa, no hay ejecutantes que se encarguen de varios instrumentos y el desempeño de muchos intérpretes deja mucho que desear. Quienes suscriben este documento, se han unido con el propósito y la intención de recuperar y engrandecer el arte musical en Bohemia".

Y más adelante la declaración afirmaba:"Los signatarios consideran que el primer y más adecuado medio para conseguir nuestro objetivo es que para cada instrumento individual se busque un excelente músico que del mismo se encargue y mediante un contrato especial asuma el compromiso no sólo de tocar durante varios años en la orquesta sino también enseñar y adiestrar a los alumnos".

"Con el fin de sufragar los gastos necesarios, los signatarios se han comprometido a pagar en los seis años subsiguientes determinadas contribuciones anuales e invitan a todos los amantes y amigos del arte musical a sumarse a la iniciativa y suscribir por lo menos 100 florines de plata para lograr el cometido propuesto, es decir la promoción del arte musical en Bohemia".

Rudolfinum
Firman:

Francisco José, conde de Vrtba

Francisco, conde de Sternberk

Juan, conde de Nostitz

Kristian, conde Clam-Gallas

Federico, conde de Nostitz

Juan conde de Pachta

Francisco, conde de Klebelsberk

Las ilustres personalidades interesadas en la promoción de la música en Bohemia conocían la musicalidad innata de los checos y querían contribuir a que adquiriese una base profesional.

Sus esfuerzos fueron sin embargo interrumpidos por las guerras napoleónicas. Las puertas del Conservatorio de Praga no se abrieron hasta el 24 de abril de 1811. Las clases se iniciaron en el convento dominicano de San Gil, siguiendo el proyecto elaborado por el primer director del Conservatorio, Friedrich Dionys Weber.

Ejercicios orquestales y escenificaciones teatrales de los alumnos del Conservatorio tuvieron lugar hasta 1830 en el palacio de Vrtba en la calle Hybernská; más tarde se habilitaron para esta finalidad recintos del convento de los dominicos.

Como profesores del Conservatorio se desempeñaron renombrados músicos checos y extranjeros, como el cantante Giuseppe Gordigiani que en los años 1842 y 1843 preparó con sus alumnos las escenificaciones en italiano de D.Giovanni y de Las Bodas de Fígaro.

'La Novia Vendida'  (Foto: CTK)
Cuando visitó la capital checa en 1845 el compositor francés Hector Berlioz quedó encantado por el nivel de la enseñanza y la calidad de los alumnos del Conservatorio de Praga.

Ganó fama mundial la escuela violinística praguense en la que se formaron, entre otros, Josef Slavík y Ferdinand Laub.

En el Conservatorio de Praga adquirieron la formación musical la estelar contralto del siglo XIX Henrietta Sontag y Eleonora de Ehrenberg, la primera Marenka de la ópera "La Novia Vendida", de Federico Smetana.

En 1888 el Conservatorio de Praga adquirió nuevos recintos en el edificio del recién concluido palacio de Rudolfinum. Cuando encabezó el Conservatorio el famoso pedagogo de violín Antonín Benewitz empezó su Edad de Oro. Benewitz era un entusiasta promotor de la música de cámara de autores nacionales y extranjeros. Por su iniciativa surgió el más célebre conjunto de cámara checo del pasado: el Cuarteto Checo, fundado en 1891.

En aquel entonces ya se enseñaban en el Conservatorio prácticamente todas las disciplinas musicales, incluidas la composición y la dirección de orquesta. En 1891 fue contratado por el Conservatorio de Praga como profesor de composición Antonín Dvorák que se desempeñaría entre 1901 y 1904 como director de este establecimiento docente.

Dvorák formó toda una pléyade de notables compositores, como Vítezslav Novák y el futuro profesor y cuatro veces rector del Conservatorio de Praga, Josef Suk.

Fueron alumnos de Antonín Dvorák en el Conservatorio de Praga también destacados compositores de operetas de fama mundial como Rudolf Friml, Oskar Nedbal y Franz Lehár.

Hubo muchas célebres personalidades que estudiaron en el Conservatorio de Praga. Los virtuosos de violín Otakar Sevcík, Jan Kubelík y Jaroslav Kocian, los renombrados directores de orquesta Václav Talich, Karel Ancerl y Rafael Kubelík.

Después de 1918, año en que se proclamó la independencia de Checoslovaquia, el Conservatorio perdió los recintos en el palacio de Rudolfinum que pasó a albergar el Parlamento. Se instaló finalmente en el edificio Na Rejdisti, en la Ciudad Vieja de Praga.

Mientras tanto, en el Conservatorio empezó la enseñanza del arte dramático y del ballet. La llamada "Escuela magistral del Conservatorio de Praga" se transformó después de la Segunda Guerra Mundial en la Academia de Artes Musicales.

Pero antes el Conservatorio tuvo que pasar por las duras pruebas de la ocupación nazi, encabezado por el Dr. Václav Holzknecht que dirigiría con tino este establecimiento musical también durante una buena parte del período del totalitarismo comunista.

Hoy en día los alumnos del Conservatorio pueden aprender a tocar todos los instrumentos musicales, incluídos el acordeón y la guitarra. Se enseña el canto, la dirección de orquesta y la representación teatral, mientras que del departamento de Danza surgió el independiente Conservatorio de Danza. El Conservatorio de Praga ofrece cada año unos 300 conciertos y 35 escenificaciones teatrales.