El proyecto de un nuevo puente ferroviario sigue causando polémicas en Praga
El histórico puente ferroviario de Výtoň en Praga está en tan mal estado, que la circulación de trenes fue reducida a partir de enero. Hay planes para la construcción de un puente nuevo, pero hay sectores de la opinión pública que se oponen.
El destino del antiguo puente ferroviario de Výtoň, bajo la colina mítica de Vyšehrad, es inseguro. El ministro de Transportes, Martin Kupka, aseguró hace poco que estaba previsto conservar esa obra arquitectónica, pero eso requiere trasladarla a otro lugar de Praga donde serviría a ciclistas y peatones.
La Administración de Ferrocarriles contrató a una agencia de relaciones públicas para convencer a los ciudadanos de la necesidad de reemplazar el puente antiguo por uno nuevo. Como dijo la portavoz de la mencionada entidad ferroviaria, Nela Eber Frýbová, el objetivo fue que expertos en la materia explicaran al público las medidas que se tomarían.
“Aparecen muchos casos de desinformación en torno a la construcción de un nuevo puente en Výtoň. Es por ello que hemos contratado asesores cualificados en relaciones públicas.”
La asociación cívica Nebourat, que insiste en la remodelación del puente reunió unas 20.000 firmas de apoyo, según dijo a la Radio Checa Pavel Štorch, al tiempo que insistió en que no difunden desinformación.
“Nosotros trabajamos con datos concretos, que nos fueron proporcionados por expertos técnicos. Por ello rechazamos cualquier acusación de difundir desinformaciones”.
La campaña realizada durante cuatro meses por la Administración de Ferrocarriles es analizada actualmente por las autoridades. Existen sospechas de sobrepago a la agencia que cobró unos 80.000 euros por la mencionada campaña.
En 2022 se realizó un concurso arquitectónico para la construcción de un puente más moderno en Výtoň que respondiera a las necesidades de la época. El concurso lo ganó la arquitecta Iveta Torkoniaková del estudio 2T Engineering.
El proyecto cuenta con la ampliación de las dimensiones del puente, al tiempo que respeta los espacios adjuntos a ambos lados del río Moldava. Mientras que muchos expertos aplaudieron la idea, la opinión pública se opuso, hecho que sorprendió de manera negativa a Torkoniaková, según dijo a Radio Wave de la Radio Checa.
“Yo estaba preparada para una crítica, una crítica constructiva que estábamos dispuestos a enfrentar, pero esa ola de opiniones adversas que se extendió por todas partes, en los medios de comunicación e internet, me sorprendió mucho”.
La arquitecta insiste en que su proyecto no busca demoler el puente, pero sugiere colocarlo en otro lugar.
“Desde el comienzo hemos contado con conservar el puente viejo, trasladándolo a otro lugar de Praga. Podría servir a los ciclistas y peatones. Hemos realizado un estudio sobre dónde podría ser instalado el puente y llegamos a la conclusión de pasarlo al barrio de Modřany”.
La arquitecta indica que su proyecto ofrece un puente minimalista. Se cuenta con hacerlo de acero, conservar los pilares antiguos, y decorarlo con arcos de bronce. Se cuenta con la construcción de una estación de trenes en Výtoň, así los viajeros tendrán una conexión con una frecuentada línea de tranvías.
Como insistió para Radio Wave la arquitecta Torkoniaková, el puente reflejará la era de la arquitectura moderna de la capital checa. En los extremos del puente construirán cafeterías, bares, un cine, parques y zonas deportivas.
La Administración de Ferrocarriles estima que los trabajos de construcción podrían empezar en 2027 y el puente podría estar listo a mediados de 2028.
