El profesor Alcantud insta en Praga a legar a un nuevo nivel en la lucha contra el racismo
La contribución de los antropólogos a las teorías racistas o antirracistas, y la elaboración de una historia del antirracismo a partir de la antropología, fue el tema de la conferencia impartida este lunes en el Instituto Cervantes de Praga por el profesor José Antonio González Alcantud.
La palabra “raza” y en general el racismo genético se encuentra actualmente en desuso, no así el racismo cultural, es decir, la creencia en la superioridad de unas etnias o grupos culturales sobre otros. Es el resultado, según comentó en su conferencia el profesor González Alcantud, de la evolución del concepto de racismo y de la lucha contra el mismo.
Durante su detallada exposición, Alcantud repasó la actividad de diferentes antropólogos antirracistas desde comienzos del siglo XX con Boas y sus seguidores hasta Claude Levi-Strauss. Si bien su trabajo consiguió desprestigiar el racismo y retirarlo de lo “políticamente correcto”, Alcantud señala el carácter persistente del desprecio u odio hacia el que es diferente, una parte de nuestra naturaleza social que hemos de mantener a raya.
“Aunque hemos elaborado el antirracismo como un símbolo de identificación, tenemos comportamientos cotidianos invisibles que podrían ser catalogados de racistas o xenófobos. Y por otro lado siempre tenemos esa amenaza de que lo íntimo se convierta en lo público y que ese pequeño racismo cotidiano mañana lo desarrollemos públicamente”.
Se trata de factor contra el que nuestros gobiernos deben intervenir más decididamente tal como explicó en entrevista para Radio Praga.
“Lo que sí está en nuestras manos es limitar el alcance del racismo, es decir, activar dispositivos de ingeniería social y cultural que impidan que eso se convierta en el discurso hegemónico por excelencia, como ocurrió en otros periodos de la historia”.
Así pues, la mera concienciación a través del sistema educativo y los medios de comunicación no sería suficiente, y harían falta medidas más concretas.
“Por ejemplo, hay que evitar la guetización de la culturas, que es un efecto que se ha producido históricamente. En contra de la idea de pluralidad cultural va el que los grupos culturales, étnicos o raciales se aíslen”, sostuvo.
De hecho, González Alcantud considera infundados el enclaustramiento y la defensa a ultranza que hacen algunas culturas minoritarias de la propia identidad. El cosmopolitismo de nuestros tiempos no sería pues una amenaza, sino una puerta a nuevas posibilidades.
“La cosmopolitización permite los cambios de identidad y permite la hibridez cultural. Entonces, en ese sentido es beneficiosa, es decir, no ataca la identidad de los individuos, les da más posibilidades de pluralidad cultural y de poder elegir su camino”, afirmó.
Para Alcantud, el modelo de actuación contra el racismo sería el proceso de desnazificación emprendido por los Aliados en la Alemania surgida después de la guerra. En aquellos momentos, los científicos sociales, y muy especialmente la escuela de Frankfurt, colaboraron con las nuevas autoridades para cambiar la forma de pensar de los alemanes.
La conferencia ‘Los Estereotipos y las Razas Culturales como Factores Persistentes en el Pensamiento’ fue organizada por el Instituto Cervantes en colaboración con la fundación Tres Culturas, como parte del programa Diálogo de Civilizaciones.
