El Parque Nacional de Krkonoše retira árboles caídos por temor a plaga de escarabajos

Foto: ČT24

El Parque Nacional Krkonoše, en el noroeste de la República Checa, está tratando de limpiar los árboles caídos que quedan después del invierno por temor a la infestación de escarabajos de la corteza. La administración del parque está ofreciendo a las personas la oportunidad de ir y procesar la madera por su cuenta a un precio razonable.

Foto: ČT24
Las fuertes nevadas de este invierno han dejado una gran cantidad de árboles caídos en los bosques del Parque Nacional Krkonoše. Según los guardas forestales del parque, es una de las peores calamidades de la madera en los últimos años.

"Los árboles simplemente se rompieron bajo el peso de la nieve", dijo Zdeněk Čermák, del departamento forestal del parque, a la Televisión Checa.

Los ambientalistas temen que si la madera no se procesa lo suficientemente pronto, podría estar infestada de escarabajos de la corteza. Sin embargo, las empresas forestales están ocupadas tratando con problemas de la madera en otras partes del país.

Radek Drahný | Foto: Česká televize,  ČT24
Para eliminar los árboles caídos lo antes posible, los silvicultores del parque han llamado a la gente de los pueblos y aldeas cercanas para que vayan a procesar la madera por su cuenta. Se vende un metro cúbico de madera por cuarenta céntimos de euro, que es siete veces menos que el precio habitual.

Según el portavoz del parque, Radek Drahný, el precio se estableció tan bajo para atraer a la mayor cantidad de personas posible. Este descuento para la madera estará disponible al menos hasta principios de julio.

La República Checa ha enfrentado un gran problema con los escarabajos de la corteza durante varios años consecutivos. Según los expertos, la situación actual es la peor en la historia de la silvicultura checa, ya que siete de las 14 regiones del país sufren infestaciones. También advierten que es probable que la situación empeore en el futuro.

Krkonoše,  foto: Magdalena Kašubová
La empresa forestal estatal Lesy ČR derribó 1.4 millones de metros cúbicos de madera afectada en el primer trimestre del año, lo que es tres veces más que en el mismo período del año pasado. Los árboles, en su mayoría coníferos, de la República Checa son muy susceptibles a las condiciones climáticas actuales, especialmente las olas de calor y las sequías, y son muy vulnerables a los cambios en el nivel de agua subterránea.

La situación en el Parque Nacional Krkonoše no es tan grave como en otras partes del país, gracias a un clima más frío y más húmedo. El parque también ha tenido éxito en reemplazar los monocultivos de coníferas y renovar los bosques mixtos tradicionales, donde las enfermedades no se propagan tan fácilmente.