El órgano perdido de Dvořák, un legado musical redescubierto en los archivos de la Radio Checa
La Radio Checa encontró en sus archivos una grabación invaluable de un órgano olvidado de Antonín Dvořák. El famoso compositor compró el instrumento para la iglesia de Třebsko en 1894, pero éste no sobrevivió a un incendio que sufrió el edificio en 1953.
En Třebsko, cerca de Vysoká u Příbrami, hay una iglesia donde el célebre Antonín Dvořák solía asistir a misa cuando estaba de vacaciones, donde tocaba el órgano. En 1894, en la época en que el compositor ya estaba trabajando en Estados Unidos, donó un nuevo órgano al templo, pero, desafortunadamente, el instrumento fue arruinado por un incendio en 1953. Recientemente, trabajadores de la Radio Checa encontraron en sus archivos grabaciones del órgano.
Sobre el instrumento en cuestión habló para la Radio Checa Jan Bondra, organista y afinador de Třebsko.
“Antonín Dvořák compró el órgano para esta iglesia, pero desgraciadamente se quemó en 1953 durante un gran incendio. No ha sobrevivido nada, solo el banco en el que Dvořák se sentaba mientras tocaba. Solía tocar aquí regularmente durante sus estancias en Vysoká. Su canción favorita era Tisickrát Pozdravujeme Tebe, Mil veces te saludamos”.
Las grabaciones que se encontraron recientemente formaban parte de un proyecto que realizó la Radio Checa entre 1941 y 1942, aproximadamente 10 años antes del incendio, llamado “Campanas de mi país”, durante el cual los trabajadores de la radio visitaban iglesias en zonas rurales y grababan sonidos de sus campanas. Entre ellas encontraron también el sonido del valioso órgano.
Vojtěch Poláček, director del Memorial Antonín Dvořák en Vysoká u Příbrami, que el compositor visitaba a menudo en sus vacaciones, leyó de los documentos oficiales el registro sobre el instrumento.
“El nuevo órgano fue donado a la iglesia local por el famoso maestro de música Antonín Dvořák. El 8 de septiembre fue consagrado y entregado a su fin. Luego está la inscripción manuscrita por el propio Antonín Dvořák: ‘Toqué el órgano en Třebsko el 8 de septiembre de 1894’”.
El propio Dvořák era un excelente organista, y en la iglesia de Třebsko tocaba regularmente en misas y a menudo improvisaba. Poláček esclareció que un órgano no era un obsequio cualquiera, ya que no era un objeto económico.
“Dvořák estaba entonces en América, sólo venía de vacaciones. Allí ganaba lo que serían hoy aproximadamente 40.000 euros al mes. Un órgano podía costar entre 800 y 1000 piezas de oro. Eso era entonces como la mitad del precio de una casa grande o el precio de un alquiler de un apartamento en Praga durante varios años por adelantado”.
Aunque el instrumento original ya no existe, la iglesia de Třebsko alberga ahora otro valioso órgano barroco, originario de Kostelec nad Orlicí, que a día de hoy sigue llenando el espacio de música.
La grabación redescubierta ofrece una rara visión del paisaje sonoro de la época de Antonín Dvořák, preservando el legado de la conexión del compositor con Třebsko y su notable regalo a su iglesia.
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