El maestro rural Frantisek Hilmar es el padre de la polca checa
En la serie dedicada al Año de la Música Checa les ofrecemos la semblanza del maestro rural y compositor, Frantisek Hilmar, el padre de la polca checa. La más célebre de sus composiciones- la polca Esmeralda- fue tocada en el siglo 19 en toda Europa y llegó a Estados Unidos. De los alegres compases de "Esmeralda" disfrutaron la escritora Jorge Sand, la emperatriz Eugenia, la reina Victoria y el presidente estadounidense James Knox Polk.
El autor de la polca Esmeralda, Frantisek Hilmar, nació en 1803 en la ciudad de Nová Paka, rodeada por montes y cerros en cuyas faldas se daban en el siglo 19 sólo el lino y las patatas. Muchas bandas de música salían de esa región pobre para ganarse el pan en el extranjero. En una de ellas tocó desde niño Frantisek Hilmar que llegó al mundo como sexto hijo de un modesto panadero.
Su maestro de la escuela primaria lo inició en la música y a los nueve años Frantisek tocaba el violín, la flauta y el piano. Antes de cumplir los 14 años, Frantisek Hilmar emprendió una gira con una banda de música de Nová Paka, actuando ante el público de Alemania, Austria, Polonia y Rusia. La maestría del adolescente músico despertaba admiración. A pesar de las generosas ofertas de sus admiradores extranjeros, Hilmar prefirió regresar a su patria.
Siendo un muchacho de 15 años, llegó con la banda de música de Nová Paka a la cercana villa de Kopidlno donde se fijó en su talento musical el párroco local. El sacerdote propuso al joven que optara por la carrera de maestro. Frantisek Hilmar sería maestro rural durante 54 años y como pedagogo sería condecorado con una cruz al mérito.
Ello facilitó su difusión internacional y "Esmeralda" subyugó a Viena y a París, fue tocada en Italia y Alemania y su partitura llegó a América. "Esmeralda" fue la primera polca checa en ganar la fama internacional.
