El Centro Checo de Madrid cumple 20 años con un ojo puesto en Latinoamérica
Mientras los Centros Checos cumplen treinta años en 2023, el Centro Checo de Madrid también celebrará su veinte aniversario. Jana Polívková, directora de la sede de la institución en España, habló para RPI de la evolución de la diplomacia cultural en este tiempo, la vuelta del público a los eventos después del COVID o el retorno de las actividades a Latinoamérica.
Los Centros Checos, el instituto cultural de la República Checa en el exterior, celebró este mes sus 30 años de existencia ampliando su red de sedes tanto en Europa, como en África y Asia. Entre sus ya cerca de 30 centros, uno de los más longevos es el de Madrid, que en diciembre cumplirá dos décadas. Su directora, Jana Polívková, contó a Radio Praga Internacional la evolución que ha visto desde que pertenece a la organización.
“Personalmente llevo ya 10 años con los Centros Checos y he visto su desarrollo, porque he trabajado en la sede central en Praga y he pasado por varios departamentos como el de comunicación o el de programación, y veo un cambio enorme. Son muy importantes los eventos culturales, pero ahora no se hacen solamente exposiciones, conciertos, etc. sino que es más networking, la conexión entre los países en el mundo de la cultura”.
Una de estas formas de conexión y diálogo entre culturas se realiza trayendo a artistas checos, en este caso a España, y poniéndolos en contacto con creadores del lugar en su entorno.
“Nos centramos más en el intercambio de artistas en residencias, por ejemplo, que es cuando un artista puede conocer mejor el espacio cultural de un país. Luego se desarrolla una exposición, pero el primer contacto es ese, hacer una residencia”.
Ese intercambio no es, de hecho, solo entre Chequia y España, sino también con el resto de Europa. Gracias a la organización EUNIC, que engloba a todos los institutos culturales de la UE presentes en cada capital. Las opciones de diálogo cultural se multiplican así. Un buen ejemplo sucederá después del verano, cuenta Polívková.
“En otoño vamos a formar un parte en un proyecto de EUNIC, donde estamos diez institutos culturales europeos, y cada uno contribuye con un artista. Nosotros vamos a traer a Sára Vondrášková, que es una artista excelente, música y compositora. Es un proyecto que se llama Flipas, muy interesante, que dura mes y medio por todo Madrid. Los institutos traen a sus artistas, pero la idea es conectarlos con artistas españoles. Entonces, están en una residencia de una semana, crean juntos, y la idea es conectar con el público de las periferias que están en una situación social inestable, para dedicarles ese tiempo y tal vez, a veces pasa, que empiezan a dedicarse a la danza, al teatro…”
Dice Jana Polívkova que después de los tiempos tan difíciles vividos durante el COVID, en los que sus actividades fueron, en gran medida, charlas a través de Zoom, ahora se vive en Madrid un momento particularmente dulce en lo cultural.
“Todavía es un renacimiento. Es muy, muy bonito, porque la gente ahora selecciona más lo que va a ver, pero todo está lleno de eventos que se llenan. Me encanta que otra vez estamos allí como si no hubiera existido el COVID”.
El regreso del Centro Checo a América Latina
El fin del COVID también permite que el Centro Checo de Madrid vuelva a realizar eventos en Latinoamérica, donde, por desgracia, ahora mismo no hay ningún Centro Checo establecido físicamente. Pero, igual que hacen otros institutos culturales europeos, desde Madrid, gracias al idioma, pueden estar de alguna forma presentes también al otro lado del Atlántico.
“Ahora, en la época postcovid, todo se paró un poquito, pero estamos desarrollando otra vez esa esas actividades y esa conexión. Por ejemplo, en otoño, a finales de noviembre, vamos a estar presentes en Guadalajara en la Feria del Libro, en México, y vamos a centrarnos en Kafka, que va a tener el aniversario el año que viene, así que vamos por allí con el tema”.
El momento de abrir un Centro Checo en alguna ciudad hispanoamericana no parece del todo cercano por ahora por cuestiones básicamente geopolíticas, siguiendo la estrategia del Ministerio de Relaciones Exteriores, en reacción a la situación internacional, como contó hace poco para RPI el propio director de los Centros Checos, Ondřej Černý, y también corrobora Jana Polívková.
“La prioridad y la estrategia del Ministerio se centra más ahora en Asia y en África, pero América Latina todavía está en el centro de atención. Creo que las prioridades dependen ahora más de la guerra en Ucrania y todo eso, pero sí que hay un mayor apoyo al Centro Checo de Madrid para organizar actividades allí”.
Y es que la cultura también es una poderosa herramienta diplomática, dice Polívková.
“Creo que la importancia de la diplomacia a través de la cultura es muy importante, porque de una forma suave, tranquila, conectas con la gente, con los mundos, y eso ahora es más importante que nunca”.
El año de Kafka y de la música checa
El Centro Checo de Madrid ya prepara sus actividades también para 2024, que estará centrado en dos importantes efemérides, como el centenario de la muerte de Franz Kafka, ya mencionado por Polívková, pero no solo ese.
“El año que viene nos centramos en Kafka, porque es un aniversario grande. Vamos a colaborar con Casa Sefarad, vamos a hacer un proyecto de seis meses, de enero a junio, con muchas actividades paralelas. También estamos hablando de ello con el Festival Eñe, que se ha abierto hacia lo europeo. Y también es el ‘año de la música checa’, así que queremos colaborar con el Teatro Real y otras instituciones”.
Como todos los años terminados en 4, se celebra el ‘año de la música checa’, ya que tanto Smetana como Dvořák o Janáček tienen aniversarios de su nacimiento o defunción en un año que termina en esa cifra. Así que ya se puede hacer una idea el público de mucho de lo que va a poder disfrutar en el futuro en Madrid y otras ciudades españolas, pero también latinoamericanas.