El apoyo militar a Ucrania es el único punto de discordia entre Chequia y Eslovaquia
El primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, visitó Chequia este viernes. Fue recibido por su homólogo Petr Fiala y mantuvo reuniones con los jefes de las cámaras del Parlamento.
Desde la partición de Checoslovaquia en 1993 es costumbre que la primera visita internacional de los presidentes o primeros ministros de Chequia y Eslovaquia sea a Praga y Bratislava respectivamente.
La República Checa y Eslovaquia han mantenido relaciones bilaterales extraordinarias gracias a su historia común en la desaparecida Checoslovaquia, en l actualidad son socios en el Grupo de Visegrád, la Unión Europea y la OTAN.
El primer ministro checo y su homólogo eslovaco dialogaron sobre la continuación de la cooperación bilateral y abarcaron temas relacionados con la política europea.
Fico saludó el hecho de que Fiala anunciara que después de la formación del gobierno polaco, tras las recientes elecciones generales, convocaría una reunión del Grupo de Visegrád (V4), que integran también Polonia y Hungría.
De acuerdo con el jefe del gobierno eslovaco, el grupo se encuentra frenado en este momento por diferentes factores, pero según Fiala, el V4 que en este momento preside Chequia trabaja y funciona, aunque por ahora no se hayan reunido los primeros ministros de los países miembros.
Para la República Checa es importante que el gobierno eslovaco apoye una política común a nivel europeo en relación con la guerra en Ucrania. No hay indicios de que esto no deba ser así, afirmó el primer ministro checo, Petr Fiala. Fico reiteró que Eslovaquia no cree en una solución militar al conflicto, pero no considera que exista una diferencia de valor con la República Checa.
Eslovaquia se niega a suministrar armas a los ucranianos, mientras que Chequia considera correcto apoyar militarmente a Ucrania, repitió Fiala. "Estoy convencido de que todavía tiene sentido, porque Ucrania necesita nuestra ayuda para su valiente lucha", añadió Fiala.
Por otro lado, según él, es necesario respetar la decisión de cualquier otro país, incluida Eslovaquia, sobre el tipo de ayuda que elijan. "Para nosotros es importan común a nivel europeo. No hay señales de que no deba ser así", añadió Fiala.
Según el Gobierno eslovaco, el conflicto está congelado y la política de sanciones contra Rusia no está funcionando muy bien, afirmó Fico. Según él, su país promueve negociaciones de paz durante las operaciones de combate suspendidas. Pero respeta a la República Checa y a cualquier otro país que decida ayudar militarmente a Ucrania. "No tenemos ninguna disputa sobre cuestiones de valor, hemos dicho muy claramente que el uso de la fuerza militar rusa es una violación del derecho internacional", añadió Fico.