El alto precio de los bioalimentos en los supermercados daña su venta

Josef Sklenář, foto: ČT

Los bioalimentos son cada vez más populares entre los habitantes de la República Checa y su producción aumenta. Sin embargo, su demanda en los supermercados no es tan alta como sería de esperar. Esto se debe al elevado margen de beneficio que aplican los comerciantes a este tipo de productos.

Josef Sklenář,  foto: ČT
Setiembre es declarado en Chequia tradicionalmente como el Mes de los Bioalimentos y la Agricultura Ecológica. Este tipo de productos goza en el país de una amplia acogida, aunque los ciudadanos se quejan de que los precios de los alimentos ecológicos en los supermercados son demasiado elevados. Precisamente el alto coste desalienta a muchas personas de su compra, afirma Josef Sklenář, propietario de la biogranja Sasov.

”El alto precio se debe al margen de beneficio aplicado por las redes comerciales. Por ejemplo, las papas ecológicas se venden a más del doble del precio de las papas convencionales. Esto tiene como resultado que los consumidores no compren las patatas ecológicas por ser demasiado caras y éstas permanecen así mucho tiempo en los supermercados o en los almacenes y pierden su calidad o se pudren”.

Los agricultores de granjas ecológicas insisten en que ellos venden sus productos a un precio comparable con la misma categoría de alimentos convencionales y que el alto coste de los bioalimentos es creado artificialmente por los comerciantes.

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Muchos agricultores ecológicos optaron por vender sus productos de forma directa, aunque la mayoría sigue cooperando con los supermercados, debido a que así tiene garantizado que sus productos sean ofrecidos a un mayor número de clientes.

Con motivo del Mes de los Bioalimentos el ministro de Agricultura, Marián Jurečka, criticó las prácticas de las cadenas de supermercados, acusándolas de abusar con sus altos márgenes comerciales del buen nombre que tienen entre los ciudadanos los alimentos ecológicos. El ministro recordó que en otros países europeos el margen de estos productos oscila entre el 10% y el 30%, mientras que en Chequia entre el 100% y el 150%. Según Jurečka, un cambio positivo en este tema dependerá de la postura que adopten al respecto los propios consumidores.

Marián Jurečka,  foto: ČT24
“El Ministerio no puede dictarle a los supermercados el margen de beneficio que aplican a los productos que venden. Pero el hecho de que en la sociedad se hable del elevado margen a los alimentos ecológicos puede tener como resultado que los consumidores presionen a las redes comerciales a bajar su. Porque realmente, el margen comercial de algunos productos ecológicos supera el 100%. Esta política afecta a los propios comerciantes. Si redujeran su margen de beneficio a los bioalimentos, aumentarían seguramente las ventas y también las ganancias de los comerciantes serían mayores”.

Los mayores márgenes comerciales se registran en el caso de la carne biológica. Por ejemplo, mientras que en una granja ecológica un kilo de carne vacuna se vende por unos siete euros, en un supermercado la misma carne cuesta 18 euros. Cada vez más personas prefieren por ello comprar los productos biológicos de manera directa, visitando personalmente las granjas ecológicas o haciendo su compra a través de Internet.