Delegacion checa en la cumbre de la OTAN

Foto: CTK

Estabilizar la situación en Afganistán y ampliar en el futuro el número de miembros, esas son dos conclusiones clave de la cumbre de la Alianza Noratlántica en la que participó también la República Checa.

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La capital de Riga, Letonia, fue a finales de noviembre el escenario de la cumbre de la Alianza Noratlántica (OTAN). Los representantes de los 26 países miembros determinaron como la principal prioridad la estabilidad en Afganistán. La directiva de la OTAN pretende hacer frente sobre todo a los rebeldes del movimiento Talibán. Sin embargo, la mayoría de los países no aceptaron reforzar sus tropas en este país asiático. Entre las excepciones figuran Polonia y también la República Checa, según confirmó el presidente Václav Klaus.

"Tras una larga deliberación, la República Checa decidió tomar parte en la operación de Afganistán e incluso aumentar la contribución de cara a futuro con recursos militares y humanos".

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La República Checa enviará el próximo año a Afganistán 225 militares, más que una mitad más que este año.

"Enviaremos a los militares checos a tres localidades distintas. Un contingente para el norte de Afganistán, luego reforzaremos con otra unidad checa la protección del aeropuerto internacional de la capital de Kabul. Además dislocaremos una unidad especial de la policía militar al sur del país," matizó el ministro de Defensa checo, Jirí Sedivý.

Además de la misión en Afganistán, se decidió también sobre la ampliación de la Alianza Noratlántica. La directiva de la OTAN ofreció un programa de entrada previa a Serbia, Montenegro y Bosnia y Herzegovina. Bajo la condición de cumplir varios criterios, prometió la entrada para el año 2008 asimismo a Albania, Croacia y Macedonia.