De guardaespaldas de Havel a director de cine
Durante la Revolución de Terciopelo de 1989, Petr Jancarek, tuvo una tarea que nunca hubiera podido imaginar: fue guardaespaldas de Václav Havel, el legendario disidente que derrotó al comunismo en Checoslovaquia, y que posteriormente fue elegido presidente de la República.
¿Cuáles son sus recuerdos de los acontecimientos de noviembre de 1989, durante la derrota del comunismo en Checoslovaquia?
"Debo decir que por aquella época era estudiante en la Academia de Cine, a pesar de haberme graduado antes como ingeniero decidí seguir estudiando, y gracias a ello participé en muchas de las actividades de esos días, y además tomé infinidad de fotografías de las manifestaciones y de todo lo resultó interesante e impactante durante la Revolución de Terciopelo".
¿Usted fue un rostro conocido de aquellos días, porque siempre se le veía junto a Václav Havel?
"Si, resulta que durante la Revolución de Terciopelo los estudiantes y los artistas fueron importantes protagonistas. Como ya dije, era estudiante y tuve la suerte -hecho bastante absurdo en mi caso- de ser uno de los primeros guardaespaldas de Václav Havel. La tarea me fue encomendada a mí, por pura casualidad, a mi hermano y a otros amigos. Eso me llevó hasta el epicentro de los acontecimientos. Fue una experiencia sumamente interesante, pero debo reconocer que todo ocurrió muy, pero muy rápido".
¿Y cómo ve las cosas a lo largo de los últimos años?
"Bueno, la democracia en la República Checa se ha consolidado, lo que es sumamente importante. Pero debo agregar que no se puede decir que todo está solucionado, porque la democracia no es un estado definitivo, la democracia es un proceso".¿Y en esta relación nos puede decir cuál es el mayor triunfo de la democracia checa?
"Estoy convencido de que el mayor triunfo es el cambio como tal, que se derrocó al comunismo, y que los ciudadanos tienen la posibilidad, el espacio real para resolver sus problemas de manera libre e independiente. Y debo destacar que en la República Checa nadie es encarcelado por expresar sus opiniones, indiferentemente de cuáles sean".
¿Usted es autor del documental "Voces de la Isla de Libertad", sobre la situación de los presos políticos en Cuba, al tiempo que sigue muy de cerca la situación en ese país. Como protagonista de la Revolución de Terciopelo y de la transición del totalitarismo a la democracia, considera que la experiencia checa puede brindar algún aporte a los cubanos?
"Partiendo del conocimiento que tengo de la sociedad cubana, de la experiencia con el comunismo en nuestro país y del seguimiento que doy desde Europa al acontecer en la Isla, creo que resultaría importante que los cubanos empiecen desde ya a prepararse de manera seria para el gran cambio que se avecina. Y espero que nuestra transición, la reforma económica, las restituciones, la privatización y el desarrollo de la sociedad civil, puedan brindar un aporte, una inspiración a los que se preparan para pasar del totalitarismo a la democracia.
¿Y desde su punto de vista de qué manera puede ayudar Europa?
"Yo saludo el hecho de que tanto personas, como instituciones, Organizaciones No Gubernamentales y Estados, a los que no les resulta indiferente la violación de los derechos humamos estén dispuestos a cooperar con programas de ayuda técnica y humanitaria a un pueblo que más pronto que tarde se integrará a la comunidad de naciones democráticas".