Los monumentos de la República Checa registraron este año un número récord de visitantes, sobrepasándose los 4,5 millones. El que recibió más turistas fue el palacio de Lednice, que atrajo a 350.000 personas.
Los turistas en el patio del Castillo de Praga|Foto: Kristýna Maková, Radio Prague International
El interés por los edificios considerados monumentos históricos crece cada año en la República Checa, solo en la temporada de verano de este año se registraron 4,5 millones de visitantes, medio millón más que en 2013. Y no se trata solamente de checos: el número de turistas extranjeros ascendió hasta casi un millón.
El éxito tiene que ver con las recientes restauraciones de varios puntos de interés, pero también con el establecimiento de un concepto diferente de las visitas turísticas que se ha acabado por imponer, comenta el vicepresidente de la Asociación para la Protección del Patrimonio Histórico, Martin Kadrman.
Martin Kadrman, foto: ČT
“En los tiempos del socialismo las visitas guiadas por castillos y palacios eran monótonas y aburridas. Hoy en día el castellano y en general el equipo entero tratan de inventar un programa interesante, para que vivan una experiencia desde los más pequeños a los adultos”.
Los buenos resultados se incrementarán previsiblemente ahora con la temporada de invierno, en la que no todos los edificios cierran sus puertas. Once monumentos admitirán visitas durante los próximos meses, aunque con horarios más limitados que en verano.
El palacio de Žleby, foto: Archivo de Radio Praga
Otros diez lugares abrirán de forma exclusiva para el domingo de adviento, como el palacio de Litomyšl, el de Sychrov o el de Bouzov, y se contará además con un programa especial. Por ejemplo, en el palacio de Žleby la cocina se abrirá ese día para ofrecer a los visitantes degustaciones gastronómicas. De la misma manera distintos edificios monumentales abrirán en día señalados de este invierno como Navidad o Nochevieja.
