¿Cuál será la suerte de las reformas de las finanzas públicas?
El Gobierno de Vladimír Spidla termina. La incertidumbre en el escenario político checo amenaza las iniciadas reformas de las finanzas públicas.
Los analistas financieros coinciden en que solamente un gobierno fuerte será capaz de llevar a cabo la reforma del sistema de pensiones, de la sanidad y de la educación pública. Por el momento nada parece indicar que sea así.
"Lo mejor para este país serían unas elecciones anticipadas que posibilitaran gobernar a los partidos que dispusieran de la mayoría en el Parlamento".
Así lo opina Ivo Nejdl, economista de Raiffeisenbank y señala que el gobierno saliente se limitó a dar los primeros pasos de las reformas.
"El Gabinete de Vladimír Spidla incrementó algunos ingresos al aumentar el impuesto sobre el valor añadido y los impuestos al consumo y redujo algunos gastos. No se trata de una reforma estructural. Han sido más bien unos cambios cosméticos que debían impedir el creciente déficit de las finanzas públicas".
Ivo Nejdl advierte que lo peor sería un gobierno de la Socialdemocracia con apoyo tácito de los comunistas. En este caso no se llevaría a cabo reforma alguna; el endeudamiento de las arcas estatales y la carga fiscal de la población seguirían aumentando todavía más. "Ésta sería una noticia alarmante tanto para los mercados financieros como para los inversionistas extranjeros", concluye el analista de Raiffeisenbank.