Cristaleros checos elaboran un relicario para el Papa Francisco
Un grupo de cristaleros checos elaboró un relicario para el Papa Francisco. Está dedicado a Zdislava de Lemberk, santa nacional, y será entregado a Su Santidad como un regalo de la Conferencia Episcopal Checa cuando visiten Roma en noviembre.
No es habitual para un pueblo como Kunratice, al norte de Bohemia, recibir la visita de un nuncio papal. Fue el arzobispo Charles Daniel Balvo quién visitó la pequeña localidad el pasado domingo para inspeccionar un relicario muy especial que descansa en el lugar. La pieza no solo cuenta con su valor artesanal sino que ha sido elaborada expresamente para el mismo Papa Francisco.
El relicario está diseñado con forma de custodia y su interior contiene un pequeño fragmento de hueso de Santa Zdislava de Lemberk. Esta fue una noble del siglo XIII reconocida por su carácter caritativo y piadoso y que acabó siendo canonizada por Juan Pablo II en 1995.
El padre Rudolf Repka de la iglesia local de Kunratice fue preguntado por la Radio Checa. Habló acerca de la pieza y de su dimensión estética, así como del simbolismo que encierra cada detalle en ella.
“El frente se decora con un sol del que salen 12 rayos. Se supone que representan tanto a las 12 tribus de Israel como a los 12 apóstoles. La parte trasera del relicario también presenta rayos de luz de vidrio, esta vez siete, que representan los siete dones del Espíritu Santo y a Dios descansando en el séptimo día de la creación".
Son varios los profesionales que han hecho posible la creación de este relicario. La pieza en sí ha sido elaborada por la empresa local de cristalería Pačinek Glass, bajo la supervisión del artesano de renombre internacional Jiří Pačinek. Este también hizo declaraciones para la Televisión Checa donde resaltó la complejidad del proceso.
“La parte más difícil de hacer es el sol. Tiene que ser tierno y frágil, pero al mismo tiempo lo suficientemente resistente para sobrevivir al transporte y la manipulación".
En cuanto a los grabados que decoran el relicario estuvieron a cargo del maestro grabador Arno Čančík. Casualmente, este reside en Polevsko, un pueblo cercano a la tumba de la propia Zdislava en Jablonné v Podještědí. El grabador también quiso compartir con la Radio Checa algunos detalles del largo proceso creativo.
“No se puede hacer esto sin usar una lupa. Algunas de las figuras tienen solo 4 mm, pero aún necesitas tallar los detalles, como sus expresiones faciales".
Los artesanos están creando tres relicarios de la santa. Todos ellos serán portados por la Conferencia Episcopal Checa en su inminente visita a Roma. Allí, el 10 de noviembre, les espera el pontífice para una audiencia general y entonces podrán hacerle entrega del presente. De las tres piezas en total una será entregada a la Santa Sede mientras que las dos restantes regresarán a Chequia. Todo esto, naturalmente, tras haber sido bendecidas por Su Santidad.