Comunistas quieren que las iglesias paguen impuestos por la compensación económica del Estado
El ministro de Finanzas, Andrej Babiš, se puso del lado de los comunistas y anunció que respalda la propuesta de estos para que las iglesias paguen impuestos por la compensación financiera que les concedió el Estado. La postura del ministro va en contra de lo establecido por la ley de restituciones vigente y crea tensión en la coalición de Gobierno.
Después de un prolongado tire y afloje, los políticos y las 16 iglesias y congregaciones religiosas que existen en el país llegaron a un acuerdo para la devolución del patrimonio confiscado por los comunistas.
El Estado checo saldó su asignatura pendiente más de dos décadas después de la Revolución de Terciopelo y empezó a devolver a las iglesias sus propiedades.
“Aplicar impuestos a la compensación económica puede ser uno de los pasos que ayuden a reducir las críticas de la población“.
La postura de los comunistas era de esperar, pero la mayor sorpresa la dio el vice primer ministro y ministro de Finanzas, Andrej Babiš.
El grito en el cielo vino desde la oposición. El diputado Marek Benda, del opositor Partido Cívico Democrático, calificó de escandalosa la actitud del ministro de Finanzas.
“La propuesta comunista es un delito, pero lo más escandaloso es que los apoye el ministro de Finanzas Babiš“.
Por su parte, el líder del también opositor partido TOP 09, Miroslav Kalousek, subrayó que todos saben que se trata de una situación especial y que el Estado no puede cambiar las cosas de manera unilateral.
El máximo representante de la iglesia católica, cardenal Dominik Duka, dijo que la sugerencia de los comunistas tiene todos los elementos de una nueva ola de persecución contra las iglesias. El cardenal aseguró que en caso de ser aceptada la propuesta comunista no dudaría en llevar el caso al Tribunal Constitucional.
