Comienza la Euro 2020: una Chequia renovada busca dar la sorpresa
Tras unos años de experimentación, la selección checa de fútbol ha conseguido reunir un bloque sólido de jugadores que se pondrán a prueba en esta Eurocopa.
El fútbol checo añora tiempos pasados donde su equipo nacional era temido por los grandes de Europa. En la Eurocopa de 1996 se alzó con la plata, lo que supone su mayor logro histórico como país independiente. Y en 2004, una selección liderada por Milan Baroš, Petr Čech y Pavel Nedvěd llegó a las semifinales.
Desde entonces, la selección checa está buscando un camino que no ha encontrado todavía. El equipo lleva 15 años sin clasificarse para una Copa Mundial de Fútbol y en su última Eurocopa, en 2016, no ganó ninguno de sus tres partidos.
Pero por fin, bajo la batuta de Jaroslav Šilhavý desde finales de 2018, el equipo nacional parece haber encontrado cierta estabilidad, un grupo sobre el que construir una base. La novedad y la juventud del grupo actual queda patente cuando vemos que el jugador con más convocatorias a sus espaldas es Vladimír Darida, que con 30 años ha participado en 72 partidos con la selección absoluta.
También cabe destacar a una de las grandes promesas del torneo, Adam Hložek, que con tan solo 18 años ya parece preparado para luchar por un puesto en el once inicial.
Luces y sombras durante la preparación
Esta suma de jugadores jóvenes que conectan bien entre sí y que ya tienen un plan táctico sólido crean un ambiente de optimismo en lo que al futuro de la selección checa respecta.
Sin embargo, la preparación para la Eurocopa comenzó con un batacazo que hirió el orgullo nacional checo. Nadie esperaba la victoria contra Italia, pero perder 4-0 y sin tener en ningún momento el control de la situación fue una humillación.
El entrenador Šilhavý fue muy directo en sus declaraciones a la Radio Checa tras el partido.
“Ningún jugador lo ha hecho bien. Čelůstka tuvo que salir del campo por lesión, antes del partido se lesionó también Tomáš Kalas. Hemos jugado mal como equipo y eso se ha notado también en la defensa”.
Pero esta semana, los jugadores checos pudieron quitarse el mal sabor de boca frente a Albania en el último partido amistoso antes del torneo.
Además de recuperar a Čelůstka y a Kalas, la selección nacional venció por 3-1 al equipo balcánico. No hay que exagerar el valor de esta victoria, pero permite empezar la Eurocopa con otro espíritu diferente, como señaló el jugador del Sparta Praga Ondřej Čelůstka.
“Psicológicamente es un estímulo para nosotros. Queremos seguir por este camino también en el partido contra Escocia y mostrarnos de la mejor manera posible. Hay que seguir siendo realistas, pero queremos seguir construyendo sobre la actuación de hoy”.
La República Checa se estrena el próximo lunes. Está encuadrada en el grupo D con Inglaterra, Croacia y Escocia. Los rivales no son nada fáciles, pero el nuevo sistema de la Eurocopa permite pasar de fase a los cuatro mejores terceros. A priori, esto debería multiplicar las opciones del equipo checo.
Aunque no todo son buenas noticias. La situación creada por la pandemia de coronavirus está provocando numerosos obstáculos. El virus ya hizo que el torneo no pudiera celebrarse en 2020 como originalmente estaba planeado, y ahora las restricciones dificultan la estancia de la selección checa en las islas británicas. Por este motivo, los checos tendrán su campamento base en Praga y volarán a Glasgow y a Londres para disputar sus partidos.
En principio, esto podría beneficiar a sus rivales. Pero lejos de venirse abajo, el jugador de la Sampdoria Jakub Jankto dijo en declaraciones para la Televisión Checa que había que buscarle el lado positivo.
“Por supuesto, es más difícil y no es agradable. Pero tenemos que adaptarnos y al menos estamos en Praga, sabemos cómo funciona todo, podemos hablar en checo con todos. Tenemos que tomarlo como una ventaja y no enfadarnos por ser uno de los pocos equipos con estas condiciones”.
A pocos días del debut contra Escocia, surge la pregunta de cómo afrontar el primer partido de la competición y si este resultado puede afectar al resto del campeonato.
En opinión del defensor Tomáš Kalas, no hay partidos que no sean importantes en una Eurocopa, pero admite que ganar o perder el primer partido influye anímicamente.
“Diría que todos los partidos son clave. Como también puede pasar de fase el tercer clasificado, habrá algo por decidir hasta el último partido. Pero, por supuesto, el primer partido tiene algo de específico porque puede afectar a todo el torneo. Después de esos tres puntos, respiraríamos más tranquilos. Entonces, creo que este primer partido será algo más importante que el resto”.
Las estrellas checas: Tomáš Souček y Patrik Schick
La lista definitiva de la República Checa se encontró de entrada con la ausencia del defensa central Ondřej Kúdela, quien se postulaba como defensor titular tras unos buenos años en el Slavia Praga. Sin embargo, su sanción por supuestos insultos racistas en la Europa League le impide estar en el torneo.
Ese percance inicial y las dudas por el estado físico de algunos jugadores quedaron atrás rápidamente al ver que el grupo tiene sólidos pilares en los que sostenerse.
En las tareas ofensivas se espera un paso adelante de Patrik Schick. El joven delantero del Bayer Leverkusen tiene talento y ha hecho una temporada decente en Alemania, pero se espera más de él. Si consigue algo más de regularidad, puede ser un jugador desequilibrante.
Pero el cerebro del equipo es Tomáš Souček, sobre el que recaerán todos los focos. Cuando Souček se encuentra en estado de gracia, el equipo entero funciona como un reloj. El centrocampista checo llegó a Inglaterra a un West Ham United que estaba luchando por evitar el descenso, mientras que esta temporada se han clasificado para la Europa League con el checo como máximo goleador del equipo.
Y en la portería, un gran conocido de la afición española, aunque no ha tenido ni mucho menos su mejor temporada. Tomáš Vaclík será con casi toda seguridad el encargado de defender bajo los tres palos. El portero termina contrato con el Sevilla, donde no ha jugado mucho en el último año, pero no parece que esto haya afectado a su desempeño con la selección nacional.