Chequia ingresa a la Guía Michelin y busca ser "uno de los mejores destinos culinarios del mundo"

Con un acuerdo de tres años, Chequia integrará oficialmente la famosa Guía Michelin, uno de los sistemas de clasificación gastronómica más respetados del mundo.

Foto: Benoît Prieur, Wikimedia Commons, CC BY-SA 4.0 DEED

La mesa está servida para que Chequia reciba, finalmente, el reconocimiento internacional por su gastronomía. El país acaba de firmar un convenio con la empresa francesa Michelin para ingresar a la prestigiosa guía que lleva el mismo nombre y que valora y destaca a los mejores restaurantes del mundo. El país ya ha pagado la cuenta de 1.3 millones de euros para que los evaluadores franceses comiencen a recorrer el país. František Reismüller, director de CzechTourism, confía en que esta alianza traerá tanto prestigio como beneficios para el sector.

František Reismüller|Foto: Zuzana Jarolímková, iROZHLAS.cz

“La cooperación con la Guía Michelin abre un nuevo capítulo en la construcción de la imagen de Chequia como un destino que no solo puede presumir de hermosos sitios históricos y maravillas naturales, sino también de una gastronomía de primer nivel. Michelin es un símbolo de excelencia culinaria y el hecho de que lo tengamos aquí en Chequia definitivamente puede aumentar la conciencia sobre nuestra cocina. Al mismo tiempo, puede atraer a un cliente que gasta más, se queda más tiempo y también aprecia la calidad, la innovación y los ingredientes locales. La gastronomía checa está mejorando cada día, a medida que hablamos, y hay un gran potencial para que Chequia se convierta en uno de los destinos culinarios más renombrados del mundo. Y por eso creemos que la cooperación con la Guía Michelin no solo nos puede traer el prestigio que esta marca conlleva, sino también una ventaja económica específica, en forma de más turismo en general y un mejor desarrollo del turismo gastronómico en particular”.

República Checa, históricamente asociada con platos tradicionales como la svíčková o el guláš –y, por supuesto, la cerveza–, ha experimentado una evolución significativa en su escena gastronómica en los últimos años, según el director de Czech Tourism. El acuerdo con Michelin forma parte de una estrategia más amplia para promover la diversidad culinaria del país y de ninguna forma se centra solo en Praga, según detalla Reismüller en diálogo con RPI.

Svíčková|Foto: Ondřej Tomšů, Radio Prague International

“Es bastante importante para nosotros que este desarrollo ocurra también fuera de Praga, que los ingredientes auténticos y regionales sean los pilares principales de la gastronomía checa, lo que realmente puede llevarla aún más lejos y ponerla entre las mejores del mundo. Tenemos una gran oportunidad ahora mismo para ser uno de los mejores destinos culinarios del mundo a largo plazo”.

Aunque el proceso de selección de restaurantes se mantendrá independiente, con los inspectores de Michelin evaluando los establecimientos de forma confidencial, Reismüller confía en que esta colaboración consolidará a Chequia como un destino culinario de primer nivel.

“La evaluación de los restaurantes depende completamente de los inspectores de Michelin. Y eso es algo positivo. Porque, si no, esto no sería objetivo, y queremos objetividad. Realmente queremos que una tercera parte evalúe cuán excelente es nuestra gastronomía y que esté al mismo nivel o incluso sea mejor que en otros países. Así que la independencia y objetividad de todo el proceso es muy importante para nosotros”.

Foto ilustrava: Charles Haynes, Wikimedia Commons, CC BY-SA 2.0

 La inclusión de Chequia en la Guía Michelin, cuyo anuncio está previsto para finales de este año, representa un hito importante para la identidad culinaria del país. Reismüller asegura que no se encuentra nervioso por los resultados del proceso. Ya la noticia del acuerdo, más allá de las conclusiones de los evaluadores, es una razón para alzar las copas, ya sea de cerveza de Pilsen o de vino de Moravia, y animarse a brindar.